El PSM propone un plan energético que aproveche los residuos

Esta iniciativa, conocida como el tratamiento de la gasificación, supondría un coste de 400 millones de euros y generaría "ahorro para los ciudadanos frente al modelo actual del Gobierno regional". Incluiría la instalación de dos plantas en el sur de la Comunidad, además de una en el norte y otra en el este.

A través de esta propuesta, la basura orgánica de las viviendas se transforma en un 50 por ciento en gases que ayudan a generar producción energética, se evapora un 40 por ciento mediante procedimientos químicos e industriales y se traduce en un 10 por ciento en compost para los jardines. Este sistema está en marcha en países como Japón o Italia.

"Nuestra propuesta no genera cenizas, como las incineradoras, minimiza las emisiones de gases, por lo que es respetuoso con el medio ambiente y supone un aprovechamiento necesario que generará energía para más de un millón de ciudadanos de la región", indicó Gómez.

El socialista propuso crear un consorcio similar al de transporte, con participación de la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de Madrid. Los consistorios son los que deberían ejecutar la gestión del tratamiento.

La propuesta presentada por Tomás Gómez se contrapone a la de la Comunidad, basada en la técnica de plasma, donde las altas temperaturas queman la basura orgánica generando cenizas. Esta iniciativa experimental, puesta en marcha en algunos hospitales, se encuentra en fase de concurso para la primera planta de estas características que estará operativa, situada en el municipio de Alcalá de Henares.

La iniciativa se dará a conocer a la sociedad a través de una campaña informativa en la que la rosa del símbolo del PSOE se sustituye por un árbol y en la que el color rojo da paso al verde.

Tomás Gómez afirmó que la Comunidad de Madrid está "al límite" porque "no caben más basuras en los vertederos". En este sentido, el líder de los socialistas apuntó que en los municipios de la región, sin contar Madrid capital, se producen cada año 1,6 millones de toneladas de basuras.

Para Gómez, la falta de una adecuada política regional en materia medioambiental se debe a que el Gobierno de Esperanza Aguirre está "desaparecido, ausente porque sólo le interesan los problemas internos del PP y su carrera política".