Un empate con sabor a poco

En un partido de trámite discreto, Argentina llegó a la igualdad de casualidad, luego que Abbondanzieri tirara un pelotazo que fue capitalizado por el Kun Agüero, que habilitó al recién ingresado Palacio que definió y consiguió un empate que más por el punto rescatado sirve para el factor anímico y para ir con todo el miércoles ante Brasil de visitante.

La gente llenó la cancha con la ilusión de ver no solamente un triunfo, sino también una goleada. Y este exitismo, más allá de los nombres que presentó la selección, llegó gracias a una prensa que presentaba como un trámite este partido y le preguntaba a Basile y a los jugadores como iban a enfrentar el clásico con Brasil, olvidándose por completo de los duros ecuatorianos.

Y eso se notó en la cancha. Con un Basile que vaya a saber uno porque insiste con Verón y con Riquelme, y, lo peor de todo es que se la jugó con los dos juntos, como si no supiera que la selección no es ni Boca ni Estudiantes, donde estos dos buenos jugadores manejan el equipo a su ritmo.
Las grandes esperanzas de la gente como Messi y Agüero no entendían como les mandaban largos pelotazos, en vez de llegar tocando, ante una defensa muy bien plantada, que resolvía sin inconvenientes los largos envíos de los volantes argentinos, y esperaban agazapados para aprovechar algún contraataque.

Así transcurrió el primer tiempo, sin llegadas importantes para ningún equipo, con la multitud que tampoco transmitió demasiado fervor para contagiar a los jugadores.

El complemento arrancó con el ingreso de Gago por Maxi Rodríguez, repartiéndose el mefio con Mascherano, quedando Verón y Riquelme para la creación, pero totalmente desconectados como para llegar tocando.

El trámite siguió desarrollándose del mismo modo, y Argentina acercó peligro con tiros libres desde buena posición ejecutados por Riquelme –aunque esta vez sin puntería- pero el juego en conjunto seguía haciéndose desear.

La lesión de Mascherano promediando el segundo tiempo provocó que Basile se la jugara con el ingreso de Cruz, pasando el Kun a jugar más cómodo, ya que en toda su carrera tuvo un nueve de área con quien “dialogar”

Mientras tanto Ecuador se animaba un poco más, y tenía como principal arma aprovechar la desesperación del conjunto nacional que dejaba muchos espacios en la defensa en la búsqueda para conseguir los tres puntos.

Es por eso que a los 23 minutos luego de una gran jugada colectiva, que comenzó en Guerrón por izquierda, el sector que le dejó Basile a Ecuador sacando a Maxi Rodríguez, que siguió con un gran taco de Tenorio para habilitar a Urrutia, quien desde el borde del área grande “fusiló” a Abbondanzieri para marcar el primer gol del partido. Si ven detenidamente la repetición van a coincidir con que el arquero pudo haber tenido otra reacción ante el disparo ecuatoriano.

De ahí hasta el final Ecuador se tiró aún más atrás, mientras que Argentina iba e iba con más fuerza que fútbol, y de esa manera las ocasiones fueron llegando, donde Cruz tuvo un cabezazo muy claro que se fue muy cerca, y Agüero, Messi y Heinze también desaprovecharon sus oportunidades.

Faltando un minuto para los 45, Verón pidió el cambio, y Basile decidió el ingreso de Palacio, que en el cuarto minuto adicional consiguió una justa igualdad.

De acá al miércoles mucho va a tener que trabajar el entrenador para cambiar la cara al equipo, y a la baja segura de Demichelis por haber llegado a la segunda amarilla, hay que sumarle que terminaron con molestias Mascherano, Maxi Rodríguez y Verón.