La cárcel de Carabanchel se transformará en hospital

El proyecto permite que 170.000 metros cuadrados ocupados durante 60 años por este centro penitenciario se conviertan en una zona con numerosos espacios abiertos y dependencias públicas. De los 129.125 metros cuadrados de aprovechamientos lucrativos, Interior ha reducido en más de un 30 por ciento su porcentaje de suelo en favor de los vecinos quedándose con 88.097.

La cárcel dejó de funcionar en 1998 y, desde entonces, Ayuntamiento y Ministerio, han mantenido una extensa negociación que ha culminado en un incremento de un 50 por ciento de la cesión del espacio reservado a equipamientos públicos: 59.000 metros cuadrados frente a los 38.000 que destinaba el Plan General de Ordenación Urbana de 1997.

El cambio posibilita la reserva de 40.000 metros cuadrados para la construcción de un hospital. Se reservarán 20.000 metros a la comisaría, el centro de internamiento de extranjeros y la escuela penitenciaria (dependencias que, si cambian de sede, se convertirán en suelo íntegramente municipal). También se guardarán 20.000 metros cuadrados para la construcción de una biblioteca y un centro de mayores u otra dependencia municipal que estime conveniente la junta municipal de distrito.

Zonas verdes y vivienda protegida
Se reformarán y ampliarán los viarios (46.000 metros cuadrados) y se crearán zonas verdes para urbanizar el complejo (23.000 metros cuadrados). En este espacio abierto al público se erigirá un monumento en honor a los represaliados políticos que fueron presos en la cárcel madrileña. Por último, habrá una zona en la que se construirán viviendas. El convenio permitirá también que el 30 por ciento de ellas sean protegidas.

El protocolo dará paso a un convenio urbanístico entre ambas instituciones a partir del cual se redactará el Plan Parcial de Reforma Interior que, previsiblemente se aprobará a principios de 2009. A finales de ese mismo año, comenzará el proyecto de urbanización y de construcción del hospital. Mientras tanto, se procederá al derribo de los edificios penitenciarios cuando se conceda la licencia para ello, en octubre de este año.

Para Rubalcaba, "el acuerdo respeta los intereses de todos y permite reponer a los vecinos una deuda histórica con ellos, atendiendo a las reivindicaciones sociales, al planeamiento urbano del Ayuntamiento y renunciando a rendimientos económicos para aumentar la dotación pública".

Ruiz-Gallardón, indicó que "se ha cerrado una herida incorporando el espacio al futuro mediante dotacional y vivienda protegida". El primer edil agradeció a Interior su cesión a la que tenía derecho e incidió en que esta postura deja claro el lenguaje social de la administración. Concluyó explicando que este proyecto permite revitalizar y reequilibrar los distritos de Latina y Carabanchel.