El seleccionador se mostró "agradecido" a lo que ahora piden que siga en el cargo, pero zanjó cualquier intento de instar su permanencia. "Ya sabe la Federación y todos que, termine como termine, se ha acabado. Estoy orgulloso de que mi trabajo haya servido para bastante, dejar a un grupo importantísimo, de jugadores que se dejan la piel y hacen un ambiente formidable, pero en lo demás no me meto. Se acabó, se terminó y punto", sentenció.
Por otra parte, respecto a Rusia, aseguró que ha mejorado no sólo por Arshavin, "que es un gran jugador". "Sorprender será difícil, pero vamos a intentarlo. Es un equipo que le gusta atacar como a nosotros. Debemos cortar donde arranca su buen hacer para el contraataque y arriesgar con la primera linea de presión, presionar de verdad, no hacer sobra y ajustar y achicar bien con la linea de cuatro para que los espacios se reduzcan", explicó.
Además, tras lo sufrido en el pasado Mundial, el equipo aprendió cosas que le han servido para "aprender muchas cosas", entre otras que "si no puedes ganar, por lo menos no pierdas", como ocurrió anoche. "El cero en nuestra portería es buenísimo, uno de los errores del Mundial, aparte de tener enfrente a Francia, fue que no supimos guardar el gol y nos fuimos arriba alegremente, aunque si hubo un equipo superior fue España, aunque perdiese 3-1", recordó
Tras el entrenamiento de este lunes, relajado y casi eufórico, Luis aseguró que dada su gran experiencia no se emociona con facilidad, pero desveló que algún mensaje de sus nietos sí le había tocado la "fibra" al tiempo que destacó que no tenía duda de que Cesc iba a marcar el penalti decisivo que dio anoche a España el pase a las semifinales de la Eurocopa.
Ninguna carga sobre los hombros
"No soy hombre de emocionarme con facilidad, estoy contento, pero llevo muchos años y ni cuando se pierde me hundo ni cuando se gana estoy por las nubes. Estoy contento por mi país, por los jugadores y por algunas gentes que me han dado su apoyo y el que no me lo ha dado me ha llevamos meditar más y eso es bueno para el grupo", expresó hoy en rueda de prensa tras el histórico triunfo de anoche.
Aragonés aseguró que no tenía "ninguna carga" sobre sus hombros y recalcó que este grupo de jugadores venía dispuesto a superar la barrera de cuartos: "No tenía ninguna carga ni nada por el estilo, en fútbol a veces se consiguen las cosas y otras no. Estoy agradecido a todo el mundo, a las críticas que me han llevado a pensar más y fundamentalmente a los jugadores, que han compuesto un grupo importante".
"Era un pequeño handicap, pero este grupo venía a olvidarse de esas cosas y, con pensamientos positivos, tratar de llegar a la final. Ahora tenemos al rival físicamente más fuerte de los semifinales y va a ser complicado, pero espero que podamos pasar, luego la final... pero primero hay que pasar este partido", concluyó.