El presidente de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, Jerome Powell, ha puesto sobre la mesa la posibilidad de llevar a cabo una bajada de los tipos de interés.
Si al final se lleva a cabo, sería la primera del banco central desde el retorno de Donald Trump a la Casa Blanca. A pesar de todo, Powell ha insistido en los riesgos para la inflación relacionados con los aranceles implementados por la administración estadounidense.
En su tradicional discurso de apertura del simposio anual de Jackson Hole, en Wyoming, Powell ha señalado que los riesgos para la inflación "se inclinan al alza".
A su vez ha destacado que los riesgos para el empleo lo hacen a la baja, lo que implica "una situación compleja" para la Fed, que debe equilibrar ambos aspectos de su doble mandato.
Powell ha destacado que el mercado laboral muestra una "curiosa" estabilidad "que resulta de una caída de la oferta y la demanda de trabajadores" pero los riesgos a la baja están subiendo.
Cambios en la economía mundial
"Este año, la economía se ha enfrentado a nuevos desafíos", ha comentado Powell.
Añade que "los aranceles significativamente más altos entre nuestros socios comerciales están transformando el sistema comercial global".
Por otro lado, ha destacado que "la política migratoria más restrictiva ha provocado una desaceleración abrupta del crecimiento de la fuerza laboral a largo plazo", ha apuntado Powell.
"Los cambios en las políticas fiscales, de gasto y regulatorias también podrían tener importantes implicaciones para el crecimiento económico y la productividad", ha añadido respecto a los efectos potenciales de la ambiciosa ley de reforma fiscal y presupuestaria que impulsó Trump y aprobó el Congreso el pasado julio.
Estas medidas han aumentado las dudas de los inversores sobre la sostenibilidad de déficit estadounidense.
Cautela ante todo
En este sentido, Powell ha destacado que los tipos de interés de la Fed se encuentran actualmente "100 puntos básicos más cerca de la neutralidad que hace un año".
Ha añadido que la estabilidad de la tasa de desempleo y otros indicadores del mercado laboral permiten proceder con cautela al considerar cambios en la postura política.
A pesar de esto, ha recalcado que "con la política en territorio restrictivo, la perspectiva base y el cambiante balance de riesgos podrían justificar un ajuste de nuestra postura", ha afirmado Powell.
En cualquier caso, el presidente de la Fed ha subrayado que la política monetaria no sigue un rumbo preestablecido.
Ha recalcado que los miembros del Comité Federal del Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés), el órgano de gobierno de la Fed, tomarán sus decisiones basándose únicamente en su evaluación de los datos y sus implicaciones para las perspectivas económicas y el balance de riesgos.
Sube la bolsa
El Dow Jones de Industriales, el principal indicador de la Bolsa de Nueva York, ha subido el 1,60%, un total de 715 puntos (hasta los 45.500 enteros). Este subidón se ha producido este viernes tras el anuncio de Powell.
A las 10:15 horas (14.15 GMT) también ha avanzado el S&P 500 un 1,40%, hasta las 6.459 unidades, y el tecnológico Nasdaq un 1,64%, hasta los 21.447 puntos (una subida de 347 enteros).
Sin embargo, falta poco menos de un mes para que la Fed se vuelva a reunir, el 16 o el 17 de septiembre para decidir sobre política monetaria.
Gran parte de los operadores anticipando una medida flexibilizadora en esa próxima junta, las declaraciones de Powell sirven como termómetro paro los inversores para medir sus posiciones en las próximas semanas.
Entre las 30 mayores cotizadas del Dow Jones destacaban en el arranque las subidas de Nike con el 3,24%, Home Depot el 2,64%, Caterpillar el 2,5%, Boeing y American Express un 2,4%, entre otras. Caídas solo para JPMorgan, del 0,31% y Coca-Cola el 0,11%.
Investigación por fraude
Por otor lado, Donald Trump, ha dicho este viernes que Lisa Cook, miembro de la Junta de Gobernadores de la Fed, a la que el Gobierno ha decidido investigar por un posible fraude hipotecario, no dimite la despedirá él mismo.
Esto, incrementa aún más la presión de su Administración sobre la entidad emisora.
"Ha hecho algo malo, así que si la despediré si no dimite", dijo Trump tajantemente al ser preguntado por los medios.
Un presidente estadounidense puede destituir a un miembro de la Junta de Gobernadores de la Fed pero sólo por causa justificada, que suele implicar mala praxis o un comportamiento delictivo, pero nunca un desacuerdo en materia de política monetaria.
Esta semana el director de la Agencia Federal de Financiamiento de la Vivienda, Bill Pulte, pidió que se investigue a Cook por 2 hipotecas a su nombre.
El propio Trump reclamó en su red social Truth Social horas después la dimisión de la economista, que fue nominada para el cargo por su predecesor, Joe Biden.
La ofensiva contra Cook se suma a la presión que la Administración Trump está ejerciendo sobre la Fed.