Juan Carlos Varela enfrentaría solo al PRD

 Nadie quiere bajarse en la oposición para ser segundo, y sin segundos no hay orquesta.  Preguntado por qué Martinelli no se bajaba en una alianza, uno de sus voceros respondió que porque iba de primero en las encuestas.  Martinelli lleva un par de años en campaña y marca primero entre los opositores.

Pero todavía no tenía rivales, pues los otros partidos no habían elegido a su candidato.  Y cuando al mismo vocero se le preguntó qué diría Martinelli si en enero, después que Juan Carlos Varela llevara 5 meses en campaña, ganara las preferencias de los opositores, enmudeció con una sonrisa de burlona aceptación: Juan Carlos Varela sería el candidato que encabezaría la nómina opositora.

El Partido Panameñista ha quedado herido, tras las serias acusaciones de Alberto Vallarino, el gran derrotado.  Vallarino dijo unas horas antes de que Varela se proclamara ganador, que como presidente del partido Varela dominaba todos los estamentos de poder, principalmente el Comité Nacional de Elecciones. Dijo también que la unidad era responsabilidad del ganador, no del perdedor.

Los politólogos concuerdan en que la única manera posible de derrotar al Partido Revolucionario Democrático es en una gran alianza opositora, algo muy difícil de concebir con el ego político de Martinelli, y el inesperado triunfo de la nueva corriente panameñista, que pone fin a varias décadas de herencia arnulfista, que dirigió el partido de a dedo.  Los llamados carcamanes arnulfistas pasaron a mejor vida, arrollados por una corriente innovadora y “de manos limpias”.  Aunque la primera aclaración que deberá hacer Varela es si manejó influencias en las mesas de votación y juntas de escrutinio.