www.diariocritico.com
Futuro minero es incierto en Ecuador

Futuro minero es incierto en Ecuador

martes 22 de julio de 2008, 00:53h
A raíz del Mandato Constituyente 6, la minería en el Ecuador quedó paralizada. Desde el 18 de abril, 4.000 empleados directos quedaron desempleados, sin contabilizar quienes dependían indirectamente del sector.

¿Existe o no confianza en el país para invertir en el sector minero? Preguntó Jorge Barrero, de la empresa IamGold, a los ex ministros de Energía y Minas, en el marco de un seminario realizado por la Cámara de Minería de Ecuador (CME).

Galo Abril, Eduardo López y Raúl Baca no dieron una respuesta alentadora. Encontraron como denominador común la inestabilidad política y la inseguridad jurídica.

“Aunque se dice que hay voluntad del Gobierno para el desarrollo de la minería, en los hechos parece que no”, comentó Barrero. Por un lado se alienta la extracción minera y por otro, se lucha para frenarla.
También se evidenció la contradicción entre el Gobierno y la Asamblea.

Para Eduardo López, si se emplea una empresa estatal, al estilo de Petroecuador significaría un gran error.
 
“Se necesita mostrar libre competencia, y sin duda el sector privado es mucho más rentable”, afirmó.

Galo Abril sostuvo que el éxito está en la combinación del sector público y privado. “No soy optimista frente al futuro”, si se estatiza a las áreas estratégicas.

“Tener una aberración a la inversión extranjera es una equivocación”. La inversión no solo trae dinero al país sino tecnología, capacitación y empleo, argumentó Abril.

Causas de la paralización
Al menos, 2.100 millones de dólares dejaron de entrar al país, como capital de inversión provenientes de las cuatro mineras más grandes: IMC, Ecuacorrientes, IamGold, Aurelian.
 
Un ex ejecutivo de Aurealian aseguró que de 480 personas, salieron 360. Él, entre uno de los que se quedaron sin trabajo. Explicó, además, que un obrero trabajaba por 380 dólares quince días y el resto del mes tenía libre.

El poder adquisitivo de estas personas en el Oriente, seguramente, no volvió a ser el mismo, comentó.  La paralización del desarrollo minero, no sólo frena la producción y avance del sector, sino otros rubros que alimentan la economía del país, asentó.

Doble discurso
Otro de los puntos que se cuestionan sobre la posición minera en el país es el doble discurso empleado por la Asamblea.
 
Según el mandato la exploración y explotación estarán condicionadas al cumplimiento estricto de la preservación del medio ambiente. Sin embargo, las concesiones mineras de pequeña escala, de subsistencia y artesanal no quedaron prohibidas, pese a que son las que más contaminan.

César Espinosa, presidente de la CME, criticó que se haya frenado el ingreso de la minería a gran escala, cuando ésta cumple con patrones internacionales de resguardo ambiental.

En un informe del Ministerio de Minas y Petróleos se muestra el peligro de la actividad minera artesanal.

Se informa que “las técnicas de producción no guardan los parámetros mínimos de protección ambiental al mantenerse irresponsablemente el uso de mercurio y cianuro, mismos que conllevan serias afectaciones al medio ambiente y a la salud”.

La descarga de estos contaminantes ha provocado la extinción de toda forma de vida superior en los ríos; además, en varios lugares, la mala calidad del agua imposibilita su uso como agua potable, para irrigación o criaderos acuáticos.

Este tipo de minería está prohibida en Estados Unidos, Canadá y Europa por el peligro de derrumbes por el uso de explosivos y por las condiciones laborales a las que están sometidos los trabajadores (exceso de calor y mala ventilación).

Sin embargo, la Asamblea Constituyente resolvió permitir que aquella minería continúe trabajando. Para el sector empresarial, esta es una maniobra política, con el fin de no peder votos en el referéndum. 

Según un estudio sobre pequeña minería en el Ecuador de Mining, Minerals and Sustainable Development, en el país hay 92.000 personas dedicadas a esta actividad. Las zonas más afectadas en el Ecuador, a causa de la minería a pequeña escala son las áreas de Portovelo-Zaruma y Ponce Enríquez.

Fracturas y oposición
Los analistas advirtieron otro problema dentro del sector, que retrasa el desarrollo de la minería. Son las fragmentaciones que existen entre grandes y pequeños mineros que no se unen para luchar por la misma causa.

Esto sumado a las negativas de grupos ambientalistas como Acción Ecológica y comunidades indígenas que no quieren que las empresas se instalen en sus poblaciones, frenan los proyectos de la producción de minerales en el país.

Que a opinión de los Shuar, la minería destruiría su forma de vida. Que ha logrado sobrevivir a lo largo de los años. “Dicen que la resolverá la pobreza, pero nosotros no nos sentimos pobres”, afirma Adela Wampash, integrante de la comunidad.

En Morona Santiago hay siete especies de oro, cobre, zinc, plata y mármol pero la extracción acabaría con 10 mil shuares que habitan en la Cordillera del Cóndor, argumenta Raúl Petzain, jefe del pueblo.

Para César Espinosa, la solución está en el diálogo y que las decisiones finales no se tomen unilateralmente. Los fundamentalismos no llevan al país a ningún lado, se debe buscar un consenso que beneficie al país y no sólo a ciertos grupos.


 

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios