Campañas

He pasado unos días en la campiña-campo de Tarragona. Veinte saludables minutos andando y estás en la playa. A una-dos horas andando estás en la montaña. El recorrido son campos llanos bien cultivados, y no se si bien retribuidos…sin montes ni asperezas-malezas con peligro de incendios.

Calor algo húmedo de 26-28 grados por el día y algo menos por la noche. A la sombra de las frondosas acacias-moreras se está casi como en el paraíso, y más después de haber quitado brotes-brozas que merman-molestan a árboles y afean el paisaje. Trabajo de siete y media a diez de la mañana que es lo propio de las faenas cuando se está de vacaciones. Si acaso, vuelvo a coger la azada y la hoz a partir de las ocho de la tarde para seguir limpiando más-menos metros cuadrados de parcelas tan fértiles como generosas.

Casi se ven crecer de un día para otro las aceitunas, los higos, las uvas, las ciruelas, las manzanas, las peras, los almendros, las avellanas, las algarrobas, las cebollas-lechugas-pimientos-tomates, las-los…

Los niños no se cansan de jugar, los mayores hacen esto o lo otro, los abuelos, tranquilos, descansan-leen-meditan. Todo resulta armonioso, equilibrado, lógico.

No hay televisión en la modesta masía. ¡Qué suerte!, una semana sin ver los caretos de los cara duras habituales de casi todos los días, una semana sin oír sus continuas sandeces. En familia, se habla, se charla, se improvisa en el desayuno-comida-cena. O se pasa un buen rato entre comidas con amigos-vecinos cabales.

Sí, hay interpretaciones, en campiña y campaña, que son más que primas hermanas al tener el denominador común de la naturaleza, del campo, del origen del todo o de casi todo.

Es correcto y edificante estar unos días en la campiña X, y hacer campañas didácticas, ecológicas, necesarias y solidarias sobre el terreno y entorno.

La parte destructiva-negativa de la palabra “campaña” es su componente bélico. Por ejemplo: “hallarse en campaña”, “salir a la campaña” o “plan de campaña”…es relacionarla con las salvajes guerras-peleas X, XX, XXX.

Y luego están las campañas orquestadas-privadas de prensa… esas que hacen-deshacen solo y exclusivamente para intereses particulares-partidistas-propios. Campañas mucho más teóricas que prácticas, mucho más demagógicas que diáfanas… que confunden o hacen confundir publicidad con realidad.

Ahora mismo nos bombardean en periódicos, radios, televisiones, redes o enredos…hasta la saciedad-suciedad por puñados-puñales de votos para las muy próximas elecciones generales. Claro, a medida que pasa el tiempo sin revoluciones pendientes-pudientes…suelen ganar los que más badajos-campanas-campañas-cencerros-medios controlan.

Los genios de la política, salvo escasas e insuficientes excepciones, no van más acá-allá en sus argumentos que: del “sálvese el que pueda”, del “tú más-menos”, del “búscate la vida” o del “perdedor el último”… como programas-propuestas de gobierno. ¡Qué categorías más vacías tienen sus falaces-falsas señorías!

A las elites-satélites más corruptas-usureras del sistema se la traen floja la extrema agonía-desigualdad-fatigas-injusticias-inmoralidades-miserias en todos los órdenes-desórdenes que genera la santísima, ¿o putísima?, trinidad económica global: ultra capitalismo, capitalismo salvaje, dictadura capitalista.

La prueba es-son sus amenazantes-arrogantes campañas “bipartidistas” del más de lo mismo o peor… para la mayor parte de la humanidad.

¿Alguien con un mínimo de sabiduría-sentido-sentimiento común todavía lo duda?