Muñecos

Esta mañana, se abrirán miles-millones de regalos que los “reyes magos” han traído para miles-millones de niñas y niños españoles.

Parece correcto dar una alegría-sorpresa a nuestros pequeños con el inconfundible atractivo de las celebraciones, de las fiestas y de los juguetes.

A los juguetes les pasa lo mismo que a los turrones y a los deseos benignos… en un altísimo porcentaje se concentran y reparten los obsequios en la noche de “Papa Noel” y en la mañana de los Reyes Magos. No sé, si la intención de los mercaderes de juegos-juguetes es intentar facturar el doble o casi… o los abuelos-padres cabales alteran poco o nada el presupuesto, haya dos días de fiesta-regalos, haya uno o haya veinte.

El caso y la cosa es que en un sistema cruel de pobreza-riqueza sin límites, hasta las niñas y niños más chiquitas-ingenuos detectan al momento las carencias o excesos cuando reciben o contrastan regalitos.

Los juguetes-obsequios vienen de siglos-milenios, algunos casi han desaparecido, otros se mantienen y ahora hay demasiadas novedades para todos los gustos y disgustos.

Los juguetes más clásicos y eternos son las muñecas para las niñas y los “guerreros-héroes”… “muñecos” en una palabra y más de ficción que reales… para los niños.

Cuando a las niñas y a los niños les desbordan tantas muñecas-muñecos, pronto aparecen los juguetes olvidados o rotos.

Cuando las niñas y los niños reciben los juguetes justos y con imaginación-enjundia, suele guardarlos como mínimo y con mimo hasta la edad de ser padres o abuelos.

Que delicia, que gozada, es tener y mantener juegos-juguetes-muñecas-muñecos de la adolescencia-infancia más allá de las modas, de los modorros y de un consumo desaforado que puede acabar consumiéndonos.

Juguete es diminutivo de juego. Ojo, los juegos constructivos y pedagógicos por excelencia, son los que proporcionan lucidez y placer físico-mental a niños y mayores.

Nada que ver con enredos y objetivos de juegos-juguetes para matar aunque sean de ficción, juegos para humillar, juegos maléficos o juegos polarizados.

Como el macabro juego que se traen entre manos-pies, y sin cabeza-corazón, unas trescientas “personas” fanáticas de no se sabe qué… que apalean y lanzan dardos a un muñeco, como ahorcado, que han puesto cerca de la sede del PSOE en Madrid y en Nochevieja… representando al Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Trescientas muñequitas y muñequitos más cobardes que cuerdos manejados por el muñeco de turno que… a su vez lo maneja el muñecón XX.

Están pasando casos y cosas impensables hace unos lustros… como el asalto al Capitolio en EEUU, hoy hace tres años; como la llegada del estrafalario Javier Milei al gobierno argentino; como los crímenes de Hamás y del primer ministro israelí Benjamín Netanyahu; como el desafío del comediante presidente de Ucrania Volodímir Zelenski a Puttin-Rusia; como el agotamiento de recursos naturales; como el peligrosísimo y ruinoso cambio climático, etc., etc., etc. Acontecimientos y desafíos alentados-financiados por enemigos del conjunto de la Humanidad. Malditos, o mamarrachos, son los que colaboran en esas y más atrocidades… sea quien sea y como sea.

Hay que ser muy perturbado, muy interesado o muy miedoso para no denunciar-acabar con tantas carencias, tantos excesos y tanta desazón.

Muñeco, es un hombre de poco carácter, que se deja manejar por otros. Muñeco, también es marioneta, monigote, pelele o títere. ¿Quién maneja los hilos de todos esos y más atropellos… a la convivencia, al civismo y a la razón?

¿Estamos en manos de gobernantes de una pieza y con sentido común o estamos en manos de falsísimas elites con sentimiento exclusivo y propio?

¡Es urgente despejar esa interrogante, o el embrutecido-infantiloide juego-juguete-muñeco conocido se va al garete más pronto que tarde… y sin respetar a nada-nadie!