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Horizonte Republicano

Por Gabriel Elorriaga F.
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elorriagafernandezhotmailcom/18/18/26
lunes 08 de enero de 2024, 11:57h

Cara a este nuevo año, Ione Belarra, secretaria general del declinante partido “Podemos” ha tenido la cómica idea de nombrar a un tal Javier Sánchez Serna como responsable de “Horizonte Republicano” de su Consejo Ciudadano Estatal. Quizá sea más acertado que perderse en un horizonte nebuloso que deprimirse con el auténtico pasado de la Memoria Histórica Republicana.

Las naciones contemporáneas llevan, cada una, su pasado histórico en sus genes sin necesidad de que se lo cuenten sus memorialistas. Algunos, como el Reino Unido, los Países Bajos, Bélgica, Luxemburgo, los Países Escandinavos, el Japón, España y las versiones menos teocráticas de la cultura musulmana, mantienen tradiciones monárquicas como símbolos “De la unidad y permanencia de la patria”. Otras, cuya configuración estatal no emana de anteriores reinos, improvisan sus símbolos con presidencialismos republicanos de más o menos calidad institucional. Ni unas ni otras pueden ser juzgadas por los altibajos de su devenir ya que la marcha de la humanidad no es lineal para ningún proyecto de vida colectiva sino ondulada con altibajos que, si no rompen la continuidad, permiten el progreso natural de los pueblos.

Sucede en algún caso, como en España, establecida como monarquía unificadora desde los Reyes Católicos y con antecedentes visigodos o celtibéricos desde la conciencia ancestral de lo hispánico, que los precedentes históricos descriptibles como republicanos son tan irrelevantes que bordean el sainete, cuando no la tragedia. Los ciudadanos españoles saben que hubo una I República de meses de desgobierno, en la que proliferaron los gérmenes de desintegración por medio de cantonalismos rivales y soberanías locales, hasta extinguirse tras una sucesión de cuatro presidencias impracticables. También saben y algunos aún añoran, que hubo otra segunda ocupación del Estado por una segunda experiencia citada benévolamente “La República, estrella fugaz” en su interesante libro actual “La Guerra Civil” por un historiador nacido en 1971, Fernando Calvo González Regueral y con voluntad conciliadora porque, tras la lectura de su objetivo relato, deja en el lector la impresión de que aquello fue más un agujero negro que una estrella fugaz de cuya oscura vorágine destructiva nos salvamos los españoles del siglo pasado por los pelos.

Aquellas agónicas tendencias desintegradoras y catastróficas, potenciadas por las ideologías exacerbadas de la Europa de los años 30, hizo que aquella “estrella fugaz”, cuya Constitución nació en Diciembre de 1931 y cuya vigencia había desaparecido del conjunto del territorio nacional en julio de 1936, originase el ambiente infernal y sangriento de un estado fallido en el territorio de uno de los reinos más antiguos del mundo. Por eso nadie valora aquel republicanismo catastrófico y considera más tranquilizador el que el año 2024 se abra con la noticia de la presencia, por primera vez, de Leonor, princesa de Asturias, en la Pascua militar con su uniforme reglamentario junto a su padre Felipe VI que celebraba el X aniversario de su reinado, y que esta semana se esté reintegrando a la disciplina de su formación militar en la Academia General de Zaragoza. Este trayecto no es un horizonte nebuloso sino un referente de continuidad concreto dentro de un marco constitucional estable.

Todo sería más tranquilizador si la imagen sucesoria no coincidiese con un presidente del Consejo de Ministros asociado y comprometido con quienes trabajan abiertamente para romper la unidad de la nación. No para recaer en una III República como proyecto nacional sino para balcanizar la nación más estratégica de la Europa Unida, creando “republiquetas” a gusto de minorías separatistas de escaso peso social pero de suficiente aritmética parlamentaria para secuestrar la igualdad entre los españoles, desterrar una cultura inclusiva y corroer los cimientos del Estado a cambio de un puñado de votos. Aún clama en lontananza la voz de aquel mozo de escuadra catalán que gritó: “¡La República no existe, idiota”. Pero sigue en marcha la amnistía, Puigdemont tele gobierna y en “Podemos” y demás “ausentes” profesionales de la Corte pero no de la nómina, otean el “horizonte republicano” para los “idiotas” con un catalejo de capitán pirata.

Gabriel Elorriaga F.

Ex diputado y ex senador

Gabriel Elorriaga F. fue diputado y senador español por el Partido Popular. Fue director del gabinete de Manuel Fraga cuando éste era ministro de Información y Turismo. También participó en la fundación del partido Reforma Democrática. También ha escrito varios libros, tales como 'Así habló Don Quijote', 'Sed de Dios', 'Diktapenuria', 'La vocación política', 'Fraga y el eje de la transición' o 'Canalejas o el liberalismo social'.

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