www.diariocritico.com

Zafarrancho de pedrismo

Por Gabriel Elorriaga F.
x
elorriagafernandezhotmailcom/18/18/26
jueves 02 de mayo de 2024, 09:53h

Pedro Sánchez estuvo cinco días cantando la canción de Celia Gámez en su espectáculo musical cuando no se quería retirar: “¿Me voy o no me voy?”. En forma de carta sentimental y no de canción se dirigió a todos los ciudadanos españoles, incluida su majestad el rey Felipe VI, primer lector privilegiado de la amorosa epístola. Una nueva obligación que, según parece, se añade a su deber de leer atentamente los documentos oficiales del reino es esta de valorar la importancia de las reflexiones románticas de los gobernantes.

Hay que imaginarse al monarca obligado a escuchar la canción del “¿Me voy o no me voy?” como todos los demás españoles, lo que identifica a la Corona con el Pueblo. Esta atención al melodrama solo retrasó un cuarto de hora la visita programada al Centro de Desactivación de Explosivos de Hoyo de Manzanares, más peligrosos que la carta de Sánchez que solo era un petardo con espoleta retardada de cinco días.

El petardo fue una nueva aportación del “pedrismo” a un género epistolar que no demanda respuesta porque contiene en sí mismo que todo es opinable, variable e inexplicable. Es el “pedrismo” en estado puro que no equivale a “petrismo” que viene de piedra —“Petrus tú eres piedra y sobre esta piedra edificaré mi iglesia”— sino que deriva de Pedrito: PSOE, sobre estos cascotes reconstruiré el partido y regeneraré la democracia.

El “pedrismo” es inescrupuloso e inoportuno. En plena campaña electoral en Cataluña y próximas elecciones europeas solo faltaba una pirueta circense para infectar el ambiente con ataques de pánico de los colaboradores y asociados de Pedro y rebajas a la reputación de España en el mundo. La amada muda y el esposo encolerizado son una imagen antifeminista y patriarcal que nada tiene que ver con el decoro político.

Sánchez logró su investidura con un esperpento prorrogado pero no la gobernabilidad de la legislatura. ¿Su dilema de “retirada o resistencia” añade un nuevo ingrediente positivo a la educación democrática de los españoles?. Solo una velada amenaza a juristas y periodistas independientes. Sánchez proclamó el zafarrancho de combate con todas sus armas contra la oposición y sus cómplices jurídicos y literarios. Su arma es su precaria mayoría en el Congreso, donde se insinúa el propósito de cambiar “a peor” la forma de elegir a los miembros del Consejo General del Poder Judicial. Todo es posible en un narcisista herido que ha perdido el sentido de la realidad y que por su camino va sustituyendo a vicepresidentas moderadoras por vicepresidentas agitadoras.

Hace un año Sánchez perdía ante Alberto Núñez Feijóo unas elecciones generales que había adelantado a voluntad propia. Se aferró a la Moncloa gracias a la concesión de promover la amnistía de Carles Puigdemont, de reunirse con Bildu y de mantener en el aire una confusa posibilidad de refrendos de autodeterminación. Ahora no sabemos cuáles serán sus nuevas ofertas para mantener a su lado a sus antiguos compañeros de viaje. Tras las elecciones catalanas se verá hasta dónde está dispuesto a pagar el “alto precio” que anuncian sus socios para mantener la ayuda al precario equilibrio parlamentario de hoy y a un mañana soñado del “pedrismo” que será presentarse de nuevo a futuras elecciones para perpetuarse en el poder y mantener indefinidamente en la oscuridad a su mística “familia Monster”.

Gabriel Elorriaga F.

Ex diputado y ex senador

Gabriel Elorriaga F. fue diputado y senador español por el Partido Popular. Fue director del gabinete de Manuel Fraga cuando éste era ministro de Información y Turismo. También participó en la fundación del partido Reforma Democrática. También ha escrito varios libros, tales como 'Así habló Don Quijote', 'Sed de Dios', 'Diktapenuria', 'La vocación política', 'Fraga y el eje de la transición' o 'Canalejas o el liberalismo social'.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios