El enemigo de los matones

"Los profesores son el enemigo. Escribe esto cien veces en una pizarra y nunca lo olvides". Richard Nixon, presidente de EEUU, a Henry Kissinger. (14/12/1972)

"Necesitamos inspiración y sabiduría: Los profesores son el enemigo". J. D. Vance, vicepresidente de EEUU. (12/04/2025)

Trump retira fondos de las subvenciones y contratos estatales a la universidad de Harvard, 2.260 millones, porque Harvard se niega a firmar un Decreto de Consentimiento que incluye "la eliminación de los programas de diversidad e inclusión, la prohibición de las mascarillas, la reforma de los criterios de admisión y contratación del profesorado y la persecución de la protesta propalestina". (11/04/2025).

Ojalá Harvard aguante por la independencia y libertad universitarias; Columbia cedió a la primera amenaza de congelación de 300 millones y firmó. Ahora su campus tiene 64 agentes con poder de detención que, por supuesto, ya han detenido a un montón de "peligrosos antisemitas", entre ellos al graduado en Columbia y activista propalestino Mahmoud Khalil, al que ha retirado su visa, su residencia permanente y un juez ha autorizado su deportación. (11/04/2025)

Esto empieza a parecer 'El cuento de la criada' de Margaret Atwood. No se trata sólo de aranceles, deuda pública con intereses crecientes y desplome del dólar que erosionan rápidamente la economía yanqui, o lo contrario y Trump es un genio de la macroeconomía. Se trata de imponer una visión uniforme de pensamiento.

Hay una creciente repulsión por Trump por lo que representa y lo que está haciendo. De pronto, existe un sentimiento de orgullo de ser europeo, que ya era hora, la verdad, y aunque la unidad territorial esté a siglos vista, tal vez un gobierno confederado esté más cerca.

Hispanoamérica, hasta ahora unos países que están por allá, llenos de corrupción y materias primas, empiezan a ser entendidos como posibles socios comerciales (menos que China y Japón con quienes estamos estrechando lazos a toda velocidad, y bien que hacemos).

Ahora, los chinos nos caen bien. No es que antes nos cayeran mal, pero eran chinos, más antipáticos que los japoneses y lejos de nuestro modo de vida. Y ahí están, trabajan mucho, no se meten con nadie y se van a morir a su país dejando aquí una generación de europeos achinados muy interesante. (La campaña de influencers chinos hablando en perfecto inglés y mostrando de mil maneras graciosas como los perjudicados en esta guerra son los estadounidenses, no tiene desperdicio).

Trump es un matón y al matón hay que ponerle límites o seguirá avanzando. Dijo Lin Jian (no se lo pierdan), portavoz chino, que "si al matón le das una pulgada, te quitará una milla".

Ahora, tras la prensa libre, su matonismo ha llegado a las universidades. Puede que la realidad, el deep state y los magnates fuera de su plutocracia lo hagan caer o desistir. O puede que Europa saque los dientes y ponga a la City a culear con Trump; que China haga subir más los intereses de la deuda yanqui (encareciendo su pago) o que invada Taiwan (sería casi de menor rango que la de Rusia a Ucrania ya que Ucrania tiene asiento en la ONU mientras que Taiwán no está reconocido oficialmente por nadie y China lo justificaría como un asunto interno.

Trump, el inútil pacificador de la guerra de Ucrania que ahí sigue sin atisbo de amainar, no lo verá igual porque China le partiría exactamente en dos la barrera de bases militares yanquis -dejando 9 desde Filipinas a Singapur y 9 desde las islas Ryukyu hasta el norte de Japón quedando Taiwán equidistante de Filipinas y Japón, con quien acaba de firmar varios acuerdos- quebrando su control del sudeste asiático). Las costuras del mundo pueden estallar por cualquier lado.

Si le ponemos límites al matón, acabará mal. Si no, tal vez peor: ya está estudiando con varios abogados cómo acceder a un tercer mandato (30/03/2025); a la agencia de noticias Associated Press (14/02/2025) le ha prohibido entrar en la Casa Blanca por escribir Golfo de México en vez de Golfo de América. Ha prohibido la contratación estatal con los bufetes de abogados que llevan o han llevado cualquier causa contra él (18/03/2025). Ahora quiere dictar a las universidades sus idearios y declara a los profesores como el enemigo. Se está cargando los derechos civiles y todos, ¡menos China!, manda cojones, estamos callados.

Seguiré gritando a la luna hasta que me pongan una camisa de fuerza o me den la nacionalidad china honoris causa, pero hay que revertir esta situación como sea.