Pedro Antonio Sánchez niega haberse manchado las manos de corrupción en el 'caso Auditorio'

El presidente de Murcia, Pedro Antonio Sánchez, declaró ante el juez que sólo fue el "impulsor político" de las obras auditorio de Puerto Lumbreras y que se limitó a aprobar los informes de los técnicos municipales, de los que se fiaba plenamente. Sobre la subvención de 6 millones de euros concedida por el Gobierno de la Región, Sánchez afirmó que se había invertido íntegramente en la obra. También destacó que la inversión "se justificó" y fue avalada "por todos los filtros que fiscalizaban que las cosas se hicieran bien".

En una comparecencia posterior ante los medios, Sánchez insistió en que sólo dimitirá, como le exige Ciudadanos, si se produce una "imputación formal" y se abre juicio oral. Afirmó que sigue cumpliendo el pacto con Ciudadanos y que no interpretarlo así obedece a una "estrategia política".

El secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, dijo ayer que es "inviable" que su formación permita que Sánchez continúe en el cargo, pero descartó igualmente que pueda haber un gobierno con Podemos. La formación que lidera Albert Rivera y el PSOE iniciarán esta semana conversaciones para buscar una salida, sin descartar la presentación de una moción de censura. El PSOE de Murcia se ha fijado un plazo máximo de 15 días para explorar las posibilidades de éxito de dicha moción.

Mientras, el coordinador general del PP, Fernando Martínez-Maillo, reiteró ayer que no se plantean "ninguna opción alternativa". Según LA RAZÓN, "el PP forzará elecciones con el presidente de Murcia como candidato si hay moción".