Polémica visita de Sánchez a Cuba en pleno proceso antifranquista: no habrá visitas a la disidencia

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, visitará este jueves y viernes Cuba, en lo que se convertirá en el primer viaje oficial de un mandatario español a la isla en 32 años. En el marco de su viaje y según destacan los periódicos, el jefe del Ejecutivo, que no se reunirá con la oposición al castrismo, se reencontrará con su homólogo, Miguel Díaz-Canel.

Sánchez estará acompañado por los ministros de Exteriores y de Industria. Uno de los puntos destacados de la visita será la reunión que mantendrá con la colonia española y con empresarios. En relación con este último punto, le acompañarán en su visita representantes de 24 empresas españolas.

El objetivo es mejorar las relaciones para las empresas españolas en pleno proceso de apertura de Cuba, pero fuentes de Moncloa confirmaron a algunos medios que Sánchez no tiene previstas reuniones o encuentros con miembros de la disidencia al régimen castrista.

Desde el PP, su líder, Pablo Casado, lamentaba ayer que el presidente visite Cuba y se reúna con el régimen en lugar de "pedir libertad y democracia" tanto en la isla como en Venezuela.

Se trata de otro viaje de su intensa agenda internacional. Ayer Sánchez acudía a la cumbre hispano-Lusa celebrada en Valladolid, que dejó como resultado 7 acuerdos entre ambos países. Entre los más destacados, se encuentra el refuerzo de la cooperación en Protección Civil en las zonas fronterizas por los incendios. Los dos países acordaron además una estrategia conjunta de lucha contra la despoblación y reconocimiento de este problema en las zonas fronterizas.

Por otra parte, el primer ministro portugués, Antonio Costa, se sumó a la "buena idea política" del presidente Sánchez de presentar una candidatura conjunta con Marruecos para organizar el Mundial de Fútbol de 2030, una idea que, explicó, necesita ser trabajada.