Así, la proposición de Ley propone que los conductores que superen en 60 kilómetros por hora el límite de vía urbana, y en 80 km/h. el límite de vía interurbana podrá ir a la cárcel. Así, el que condujera a más de 200 km/h. autopista; a más de 180 km/h. en carretera, y a 110 km/h. en núcleo urbano podrían ser encarcelados.
Asimismo, los conductores que sobrepasen la tasa de alcohol en sangre superior a 1,20 gramos por litro también podrán ir a prisión. El PP pedía que el límite de alcoholemia fuera el 1,50 gramos. Otra de las conductas que puede acarrear penas de prisión es la conducción sin permiso vigente o por haber perdido la totalidad de los puntos del carné de conducir.