El ministro de Fomento,
José Blanco, hizo la ‘gracieta’ de revelar que el ex presidente del Gobierno,
José María Aznar, contaba con 51 policías de escolta y se preguntaba que si al PP le parecía un gasto mayor, igual o menor que el uso del famoso Falcon por el presidente
Rodríguez Zapatero para ‘mitinear’. La tormenta político-policial ha sido de órdago, por razones obvias: afecta a la seguridad de un ex presidente del Gobierno que, además de haber sido objeto de un atentado terrorista en 2005, sigue estando en el punto de mira de ETA.
Pero es que, además, según medios de toda solvencia consultados por
Diariocrítico, Aznar no cuenta ni con 51, ni con 40 ni siquiera con 30 policías para él solito: la cifra exacta para la escolta de Aznar –todos los turnos de escolta, se sobreentiende- es de 25, la mitad de lo que dijo Blanco.
Y en tercer lugar, quien designa el dispositivo de seguridad del actual presidente del Gobierno y del ex presidente se fija con los mismos criterios por parte de los responsables de seguridad de la propia Presidencia del Gobierno, y se hace, según fuentes oficiales, en función de las circunstancias y las necesidades y siempre con los mismos criterios.
De momento, Aznar ha hecho pública una nota en la que califica a los ministros José Blanco y
Celestino Corbacho –que coreó al primero- de
"imprudencia temeraria" por revelar datos de su seguridad. La secretaria general del PP,
María Dolores de Cospedal, por su parte, ve tan
"desesperado" al PSOE en estas elecciones que cae en la "
irresponsabilidad". Y la portavoz popular en el Congreso,
Soraya Sáenz de Santamaría, ha pedido la comparecencia parlamentaria de
Fernández de la Vega para que explique por qué un miembro del Gobierno hace públicos los datos sobre seguridad.
Interior le da un tirón de orejas a Blanco
La ‘metedura de pata’ del ministro de Fomento ha sido tan patente, que hasta el propio Ministerio del Interior se ha visto obligado a salir al quite, señalando que
“las Fuerzas de Seguridad del Estado, bajo la dirección del Gobierno, son responsables de la seguridad de los presidentes y ex presidentes del Gobierno de España”, y añadiendo que “
el Gobierno asume plenamente esa responsabilidad y la ejerce con todos los medios que se consideran necesarios en cada caso y en los términos que los propios servicios de seguridad establecen”.
Según el departamento que dirige
Alfredo Pérez Rubalcaba, “
así lo exige la seguridad de las personas protegidas y los intereses del conjunto de la sociedad y del Estado, por la alta representación que ejercen o han ejercido quienes desempeñan la Presidencia del Gobierno”. Y añade una frase que se contiene un reproche a José Blanco: “
Es una tarea de las Fuerzas de seguridad que debe ser respetada siempre por todos”. Pese a todo, el mal ya está hecho.
Si (
No(
