Según ha sabido
Diariocrítico de fuentes populares dignas de crédito, el almuerzo tuvo lugar el pasado 25 de agosto en Ávila y sólo hubo dos comensales:
Esperanza Aguirre y
Ángel Acebes. En el almuerzo se habló, al parecer, del deterioro de la situación política en general y en particular de las encuestas internas del PP que, pese a la crisis económica y el consiguiente desgaste del Gobierno socialista, ofrecen escaso margen de maniobra al PP presidido por
Mariano Rajoy.
Es conocida la excelente relación entre Aguirre y Acebes, encuadrados ambos dentro de las tendencias más conservadoras del PP, y en el transcurso de ese almuerzo la presidenta madrileña le habría comentado, según las citadas fuentes, que necesitaba realizar una importante ofensiva política dado el grado de desgaste al que está sometido el gobierno madrileño, afectado por el escándalo del espionaje político y, sobre todo, por el ‘caso Gürtel’. En el PP madrileño se cree, además, que podrían estar a punto de salir otro tipo de escándalos y que, en todo, caso 2010 se presenta mal porque empezarán a verse los juicios por el ‘caso Gürtel’, lo que afectaría negativamente al PP de Madrid de cara a los comicios autonómicos de 2011.
.jpg)
Según ese análisis, Esperanza Aguirre necesitaría una fuerte remodelación en su Ejecutivo, librándose de determinadas ‘cargas’ –se cita textualmente al consejero de Presidencia e Interior,
Francisco Granados, y al vicepresidente
Ignacio González- e introduciendo nombres de peso, además de completamente afines a sus planteamientos políticos. De ahí la oferta a Ángel Acebes para convertirse en el hombre fuerte del Gobierno regional.
Según nuestras fuentes, Acebes no se mostró entusiasmado con la idea, aunque se dejó ‘querer’, y señaló a Aguirre que lo que necesitaba era savia nueva en Madrid. En ese punto sería donde Aguirre le hizo la oferta alternativa: poner su nombre en circulación para presidir Caja Madrid ante lo que se presume como inminente relevo de
Miguel Blesa al frente de la entidad financiera. Pero parece que esta oferta tampoco entusiasmó a Acebes, que se mantiene desde mayo de 2008, cuando abandonó la Secretaría General del PP, en un discreto retiro como diputado en el Congreso.