El día siguiente al trágico temporal: solo en Cataluña murieron 7 personas

El rastro del temporal, que ha azotado Cataluña con rachas superiores a los cien kilómetros por hora en la mayoría de comarcas, era aún hoy visible en las calles de muchos pueblos y ciudades, con árboles caídos, farolas, motocicletas y carteles volcados y cornisas desprendidas.

Los equipos de limpieza se han afanado en retirar de aceras y carreteras los árboles y demás elementos que entorpecían el paso y la circulación.

La normalidad, no obstante, aún no se ha recuperado ni en el servicio ferroviario ni en el eléctrico, ya que aún permanecen más de 100.000 abonados sin suministro, según Fecsa-Endesa.

El capítulo más trágico de este temporal ha sido la muerte de cuatro niños de entre 9 y 12 años a consecuencia del hundimiento de un edificio anexo al campo de béisbol de Sant Boi de Llobregat (Barcelona).

Tres niños han resultado heridos en ese accidente y se encuentran ingresados en la UCI, aunque "no se teme por su vida". Otros cuatro menores y un adulto también se encuentran ingresados fuera de peligro en diferentes hospitales de Barcelona.

El temporal de viento, además, se cobró ayer la vida de otros dos hombres en las localidades barcelonesas de Abrera y La Palma de Cervelló al caerles encima sendos árboles, a la vez que causó otros tres heridos graves. El viernes por la tarde falleció una mujer en Barcelona al caerle un muro encima.

La Generalitat mantiene activada la fase de emergencia del plan Procicat por las fuertes rachas de viento, aunque este mediodía actualizará la situación y podría dar por finalizada la emergencia.