Si no han sido motivos de política interna, parece que la pandemia de coronavirus y su gestión sí podría suponer que Donald Trump no salga reelegido en las elecciones de noviembre.
Más alla de su aparente poca popularidad, casi todos los presidentes desde la Segunda Guerra Mundial han salido reelegido y por tanto han agotado sus 8 años de mandato de máximo legal, como ha ocurrido con los últimos: Barack Obama, George W. Bush y Bill Clinton.
Los últimos que fracasaron en su intento de lograr el segundo mandato fueron George Bush padre, en 1993, y Jimmy Carter, en 1981.
En total, 27 presidentes no han conseguido la reelección en toda la historia de EEUU, pero si tenemos en cuenta el corte de 1900 como una nueva era, sólo 4 han fracasado: los 2 mencionados y Herbert Hoover y Gerald Ford, aunque este último defendía el mandato del anterior mandatario, el dimitido Richard Nixon.
Las encuestas pintan mal para Trump, y eso sí que podría ser una barrera insuperable, ya que nunca un candidato que ha estado a unos 10 puntos de desventaja frente al favorito ha conseguido remontar. Por ejemplo, Trump no estuvo a tanta distancia de Hillary Clinton cuando al principio iba por detrás de ella en los sondeos ni los rivales de Obama -John McCain y Mitt Romney- se vieron tan lejos del objetivo.
Las 3 últimas encuestas dejan una media de unos 9 puntos de desventaja de Trump frente a Joe Biden, el nuevo candidato demócrata, quien fuera vicepresidente de Obama durante 2 mandatos.
Y es que la gestión sanitaria de la pandemia ha sido nefasta para la Administración Trump. Estados Unidos es el país del planeta que presenta las cifras más abultadas, con 4,37 millones de afectados por la covid-19 y suma casi 150.000 fallecidos. Supone un 3,4% de mortalidad y una ratio de 453 muertos por cada millón de habitantes. Además, está entre los países con mayor proporción de contagios por cada millón de habitantes, 13.222, algo que desmentía Trump.
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