Después de la covid, la OMS también pone fin a la emergencia internacional por viruela del mono

El director general de la OMS, el doctor Tedros Adhanom, hizo público el informe del Comité de Emergencia del Reglamento Sanitario Internacional que ponía fin a la emergencia por el brote multinacional de viruela del mono (monkey pox).

El Comité de Emergencias reconoció el progreso logrado en la respuesta mundial al brote y la disminución del número de casos notificados desde la última reunión.

Se observó una disminución significativa en el número de casos notificados en comparación con el período de notificación anterior y ningún cambio en la gravedad y manifestación clínica de la enfermedad.

Continúan las incertidumbres sobre la enfermedad, sobre todo con respecto a los modos de transmisión, y preocupa la mala calidad de algunos datos recabados, así como la falta de contramedidas efectivas en los países africanos, donde la viruela del mono tiene brotes regularmente.

Pese a todo, el Comité consideró que estos desafíos se abordarían mejor mediante una estrategia a largo plazo y no como medidas de emergencia, como era el caso actual por viruela del mono (monkey pox).

Recomendaciones temporales

Las recomendaciones temporales continúan respaldando el objetivo del Plan estratégico de preparación, preparación y respuesta de la OMS para la viruela del mono 2022-2023 y las pautas operativas de la OMS para detener el brote y cumplir los objetivos de interrumpir la transmisión de persona a persona, proteger a los vulnerables y minimizar transmisión zoonótica del virus.

Cualquier país puede experimentar todavía una importación o transmisión local de la viruela del mono y algunos también pueden experimentar una transmisión zoonótica (entre animales y personas).

La OMS pide implementar recomendaciones temporales para hacer frente a la enfermedad, garantizando el pleno respeto de la dignidad, los derechos humanos y las libertades fundamentales de las personas.

Los objetivos y recomendaciones que plantea la OMS son:

• Mantener y promover los elementos clave de la estrategia de respuesta de monkey pox y revisar su experiencia para informar las políticas, los programas y las acciones de salud pública.
• Desarrollar e implementar planes integrados de control de la mpox y una estrategia de eliminación con el objetivo de prevenir y detener la transmisión de persona a persona y/o mitigar las transmisiones zoonóticas, según corresponda.
• Mantener la vigilancia epidemiológica de la monkey pox, haciendo todo lo posible para asegurar la confirmación de laboratorio de los casos sospechosos y la notificación a la OMS de los casos confirmados y probables, de acuerdo con las variables definidas en el Formulario de notificación de casos de la OMS.
• Informar inmediatamente a la OMS de todos los casos confirmados de mpox relacionados con viajes a través de los canales establecidos en virtud de las disposiciones del RSI.
• Integrar la detección, la prevención, la atención y la investigación de la monkey pox con los programas existentes e innovadores de prevención y control del VIH y las enfermedades de transmisión sexual, y otros servicios de salud, según corresponda.
• Sostener e invertir en la comunicación de riesgos y el apoyo y la participación de la comunidad para las comunidades afectadas y los grupos en riesgo, incluso a través de las autoridades sanitarias y la sociedad civil.
• Continuar implementando intervenciones para evitar el estigma y la discriminación contra cualquier persona o grupo que pueda verse afectado por la monkey pox.
• Apoyar y mejorar el acceso a diagnósticos, vacunas y terapias para promover la equidad en salud global, en particular para las comunidades más afectadas en todo el mundo, incluidos hombres homosexuales, bisexuales y otros hombres que tienen relaciones sexuales con hombres, con especial atención a los más marginados dentro de esos grupos, y en recursos.
• Continuar fortaleciendo la capacidad de diagnóstico, el acceso descentralizado a las pruebas y la secuenciación genómica, incluido el intercambio de datos de secuencias genéticas a través de bases de datos públicas.
• Continuar poniendo a disposición vacunas para la vacunación preventiva primaria (pre-exposición) y post-exposición para personas y comunidades con alto riesgo de monkey pox.
• Garantizar la prestación de una atención clínica óptima con medidas de prevención y control de infecciones implementadas para casos sospechosos o confirmados de monkey pox en todos los entornos clínicos.
• Garantizar la formación de los proveedores de atención de la salud en consecuencia.
• Fortalecer la capacidad en entornos rurales y de recursos limitados donde la mpox continúa ocurriendo, para comprender mejor los modos de transmisión, cuantificar las necesidades de recursos y responder a brotes y cadenas sostenidas de transmisión.
• Implementar una agenda de investigación coordinada para generar y difundir rápidamente evidencia sobre aspectos científicos, sociales, clínicos y de salud pública clave de la prevención y el control de la monkey pox.
• Continuar los ensayos clínicos de contramedidas médicas, incluidas vacunas, terapias y diagnósticos, en diferentes poblaciones, además de monitorear la seguridad de las vacunas, la efectividad y la duración de la protección contra la infección y la vacunación.
• Los países de África Occidental, Central y Oriental donde la monkey pox es endémica deben hacer esfuerzos adicionales para dilucidar el riesgo, la vulnerabilidad y el impacto relacionados con ella y para investigar, comprender y controlar la mpox en sus respectivos entornos, incluida la consideración de modos zoonóticos, sexuales y de otro tipo. transmisión en diferentes grupos demográficos.