Tras el carpetazo mediático, sin consecuencias políticas, al polémico cobro del bono social térmico por parte de varios representantes en la Asamblea, entre los que figura el vicepresidente y consejero de Educación y Universidades regional, Enrique Ossorio, la líder y candidata de Más Madrid a los comicios del próximo 28 de mayo, Mónica García, o el secretario general del Partido Popular madrileño, Alfonso Serrano, el Gobierno de la Comunidad ha vuelto a poner en marcha medidas para favorecer a las familias numerosas, uno de los caladeros electorales tradicionales del PP. En esta ocasión, se trata de la renovación automática del título de familia numerosa hasta que el menor de los hijos haya cumplido los 26 años de edad.
Tal y como ha explicado el propio Ossorio en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, la aprobación de este Decreto se encamina a "reducir las trabas burocráticas" que afectan a tal acreditación al trasladar a la Comunidad la labor de verificar la vigencia de la misma, una responsabilidad que, hasta la fecha, recaía en las familias. De esta forma, el Ejecutivo aspira a "incrementar la protección y los beneficios" que otorga a las más de 138.000 familias numerosas que viven en la región. “Hasta ahora, las familias debían justificar que continuaban cumpliendo con las condiciones necesarias para renovar el título. Desde este momento, será la Administración quien lleve a cabo el seguimiento y compruebe que se reúnen los requisitos”, ha señalado.
El nuevo mecanismo se justifica en una realidad social en la que la edad de permanencia en el hogar familiar se ha prolongado fruto de la duración de los estudios y la mayor dependencia económica que experimentan los jóvenes en la actualidad. Así, las familias con tres o mas hijos ya no deberán certificar, una vez estos vayan cumpliendo los 21 años, que continúan estudiando, tal y como exigía la normativa anterior para seguir disfrutando de los beneficios adscritos al título. Por el contrario, la acreditación será válida para cada uno de los hijos hasta que cumplan los 26 años. Por su parte, los progenitores gozarán de ella, sin necesidad de trámite alguno, hasta que el menor los haya cumplido.
No obstante, el decreto incluye alguna excepción a tener en cuenta. En caso de que alguno de los descendientes incurriese en alguna de las causas establecidas por ley para su exclusión, como haber finalizado sus estudios, la propia familia tendrá la obligación de comunicar tal circunstancia a la Administración. Acto seguido, será esta quien retire el título individual, conservando intactos el del resto de miembros de la unidad familiar.
El consejero de Educación y Universidades no ha dejado pasar la oportunidad de poner en valor ante la prensa todos aquellos beneficios de los que ya disfrutan las familias numerosas madrileñas. Entre ellas destaca la deducción de 900 euros en el IRPF por nacimiento o adopción tras el tercer hijo, el descuento de hasta un 50 por ciento en el abono transporte o las bonificaciones de las que disfrutan en determinados servicios y actividades organizadas por los centros educativos públicos de la región.
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