En Francia no tienen familia real, ni falta que les hace porque tienen a la esposa de Sarkozy, una estupenda señora (ex modelo y cantante), que ahora además es comentarista política que no se corta un pelo en decir lo que piensa. Como la reina Sofía.
En Francia no tienen familia real ni personajes que pertenezcan a ella, ni falta que les hace porque en tienen república con un presidente más que polémico y una estupenda señora (ex modelo y cantante) que ahora además es comentarista política que no se corta un pelo en decir lo que piensa. Como la reina Sofía.
Berlusconi, ese gran hombre de Estado conocido sobre todo por sus declaraciones a favor de la democracia, y muy conocido también por su preocupación por los pobres en el mundo, las basuras en Nápoles, el botox en la cara y el bronceado permanente, ha hecho de nuevo de las suyas y declarado lo contento que está con el triunfo de Barack Obama y que le gusta porque es joven y está siempre morenito.
Berlusconi, que es como Hugo Chávez, campeón de mete patas, se ha encontrado ahora con la respuesta a sus comentarios de la Bruni que, como es artista, es sensible, y por tanto le duelen eso tipo de salidas de tono y, como pocos pelos en la boca tiene, pues le ha contestado diciendo que escuchando cosas así “se siente orgullosa de ya no ser italiana y de ser ahora francesa”.
Bruni no es como otras mujeres de pasado menos “principesco” como Letizia o Mette Marit que, para desechar cualquier atisbo de esa época se visten ahora como mujeres recatadas, y no esconde lo que piensa. Subida a su atalaya de primera dama de Francia, que no desde altos tacones, se mueve la melena y comentando lo que comenta mete en un lío de narices diplomático a su querido esposo, Nicolás Sarkzozy.
Como ven, tenemos primeras damas que largan en cualquier parte del mundo y lo que te rondaré morena porque me imagino que pronto hará de las suyas Michel Obama que tiene pinta de no quedarse callada. Ahora sólo nos falta que hable también Sonsoles Espinosa.