El Ministerio de Salud (MSP) acaba de dar a conocer un informe sobre la situación de la gripe A en el país, que nos obliga a reflexionar sobre la necesidad impostergable de extremar las precauciones, no sólo a nivel institucional, sino principalmente en el plano individual y familiar.
En efecto, según el Ministerio, hasta ahora 1.318 casos han resultado positivos y 67 personas han muerto por el virus.
Con el invierno se aproxima y con él una atmósfera propicia para la aparición de enfermedades respiratorias de todo tipo y la que de hecho hay que prevenir y combatir, dada la manera como se ha comportado nuestro país y que aún puede afectarlo más, es la gripe debida al virus H1N1. Según el Ministerio de Salud la mayor cantidad de casos confirmados se ubican en El Guayas, con 366, y en Pichincha, con 342.
A estas dos provincias les siguen Loja (sur), con 128 casos; Manabí (oeste), con 81; Azuay (sur), con 65 casos; Chimborazo (andes centrales) con 54 casos y El Oro (sur) con 49, mientras en el resto de provincias la incidencia es menor.
El 72 % de los enfermos afectan a los niños entre 1y 9 años, los adolescentes entre 10 y 14 años y los jóvenes entre 15 y 29 años.
Por tanto, el inicio de clases en la Sierra y la Amazonia requiere de una especial atención, de acuerdo con los grupos de edades más vulnerables. Un problema como éste, entre otros, debería ocupar las sabatinas presidenciales. Porque preverlos, afrontarlos y trabajar para solucionarlos es obligación de quienes asumieron el poder con el grueso del voto popular.
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