El aumento de las pernoctaciones se produjo tanto entre los residentes, cuya tasa interanual se situó en el 11,4%, como entre los no residentes, con una variación del 2,9%.
La estancia media disminuyó en marzo un 5,4% respecto al mismo mes de 2006, situándose en un total de 6,3 pernoctaciones por viajero.