Según su versión, una de las mujeres que formaba parte del grupo logró escapar y denunciar lo sucedido. Otras fuentes aseguran que el grupo lo integraban 22 personas y que dos se salvaron porque en el momento del asalto habían abandonado el autobús para ir a comprar unas cosas.
Sin embargo, según ha explicado el director de la Policía Judicial, Fernando Monreal Leyva, cuando el autobús en que viajaban hizo un alto, dos turistas "bajaron a comprar algunas cosas en la glorieta de Costa Azul y los desconocidos los interceptaron, luego bajaron al resto, todos trabajadores de un taller de alineación y balanceo",
De los autores del secuestro se sabe, por la denuncia que ha tramitado uno de los miembros de la expedición procedente de Morelia, que viajaban en cuatro autos con matrícula de Michoacán y que aprovecharon una parada del autobús para llevárselos a todos consigo.
El estado de Michoacán es colindante con el de Guerrero, donde se encuentra Acapulco. Allí, territorio del cártel de la Familia, se han vivido numerosos sucesos violentos desde hace meses, que han acabado con el mito que hizo de este balneario un destino paradisiaco en los años 70.