La ceremonia se realizó en la Base Miguel de Cervantes, en Marjayún, en el sureste de España y fue presidida por el ministro español de Defensa, José Antonio Alonso, quien destacó la misión de los uniformados.
Tres de los seis efectivos fallecidos son colombianos nacionalizados españoles e integraban el contingente de las Fuerzas de Pacificación de la ONU en el Líbano (UNIFIL), donde desde agosto pasado fueron desplegados en el sur por acuerdo del Consejo de Seguridad.
España envió mil 100 soldados como parte de la UNIFIL, junto a tropas de unos 30 países.
Los efectivos patrullaban el principal camino que enlaza las ciudades de Marjayún y Jiam cuando el transporte militar blindado en que viajaban contactó con un artefacto explosivo, que hizo volar por los aires el vehículo.
Hasta el momento ninguna organización se atribuyó el atentado.
El ministro del Interior libanés, Hassan Saba, expresó al director general de la Policía y la Guardia Civil españolas, Joan Mesquida, de visita oficial en esta capital, que el gobierno designó a los mejores agentes y equipos para encontrar a los autores.
Fuad Siniora, primer ministro libanés, dio instrucciones para redoblar los esfuerzos en busca de los responsables, señaló.
Mesquida sostuvo, además, conversaciones con el jefe de la Policía libanesa, Ashraf Rifi, con quien firmó una serie de acuerdos.
Una declaración del gabinete indicó que el ataque va en contra de la estabilidad y la seguridad del país y constituye un reto a la comunidad internacional.