Un hombre de 85 años, vecino de la localidad de Torremayor, Badajoz, ha fallecido este lunes en el Hospital Perpetuo Socorro de la capital pacense por culpa de las altas temperaturas, según ha anunciado la Junta de Extremadura.
Se trata de la segunda muerte por golpe de calor en esta comunidad en lo que llevamos de verano, después de que en julio muriera un varón de 67 años en Plasencia, Cáceres.
La muerte del anciano de Torremayor se da al justo al comienzo de la segunda ola de calor de verano, que empezó el domingo 3 de agosto y va a durar hasta el próximo domingo 10. Badajoz lleva desde este lunes en aviso naranja por altas temperaturas, con máximas que van a alcanzar los 42 grados.
La exposición a temperaturas muy altas puede causar calambres, mareos, cefaleas, deshidratación, insolación, y, lo más problemático de todo, un golpe de calor, ya que este puede causar un daño multiorgánico, convulsiones, un coma o la muerte, tal y como señala el Servicio Extremeño de Salud (SES).
Mayores y enfermos crónicos son la población más vulnerable
Las personas mayores y los menores son bastante más sensibles a los cambios de temperatura, y en las personas con algunas enfermedades crónicas sometidas a tratamientos médicos o con discapacidades que pueden limitar su autonomía, los mecanismos de termorregulación pueden terminar siendo descompensados.
En concreto, son muy susceptibles los mayores de 65 años, los menores de 4, las embarazadas, las personas que tienen trastornos de la memoria o las que reciben algunos tratamientos como diuréticos, neurolépticos, anticolinérgicos y tranquilizantes.
Los sanitarios aconsejan que se evite la exposición al sol en las horas centrales del día; beber muchos líquidos, especialmente agua y zumos de fruta refrigerados, sin que sea necesario tener sed; evitar comidas abundantes y no consumir muchas bebidas alcohólicas.
Más de 1.500 muertes atribuibles al calor en España en 2025
Las muertes directas por golpe de calor son solo una pequeña parte, un 3%, del total de fallecimientos por culpa de las altas temperaturas. La mayoría de ellas se dan por el empeoramiento de patologías previas. Por ejemplo, en 2023 se produjeron 75 muertes por golpe de calor del total de 3.009 relacionadas con el calor, de acuerdo con el sistema de Vigilancia de la Mortalidad diaria (MoMo) que crea el Instituto de Salud Carlos III.