La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, quiso ser muy contundente en su postura de que nadie pueda discutir su apariencia y su forma de vestir por el hecho de ser mujer y lo pagó con dureza contra una estudiante.
En concreto, Colau participó en un acto en la Universidad Pompeu Fabra y una estudiante de Periodismo le quiso hacer una pregunta incipiente.
Esta universitaria quiso que la alcaldesa y líder de Catalunya en Comú explicara por qué ha cambiado tanto su forma de vestir desde su etapa como activista hasta ahora, que es una política ya asentada en la profesión: "Las primeras imágenes de Ada en política eran sobre todo con camisetas más reivindicativas, cosas que daban más las ideas que tenía. ¿Ahora la ropa más formal refleja una maduración de ideas o una moderación política?".
Reacción de Colau
Colau se lo tomó a mal y fue demasiado contundente en su respuesta: "Me sabe mal, entiendo la intención de la pregunta, pero me sabe mal que una mujer me pregunte sobre mi forma de vestir y no responderé". "Sobre cómo me visto y categorizar cómo me visto. Está fuera de lugar, me visto cómo me da la gana, básicamente", finalizó su respuesta.
El vídeo, que fue reproducido por 'NacióDigital', se ha viralizado ahora en Internet y se considera que Colau, aunque quisiera lanzar un mensaje reivindicativo sobre que nadie debe decirle cómo vestir y cómo no, fue excesivamente dura con la estudiante, que simplemente quería incidir en su cambio de estética desde que se inició en la política.
Disculpa pública
Tal fue el revuelo originado que Colau reaccionó en redes sociales a la controversia creada: "En mis casi 8 años como alcaldesa he perdido la cuenta de cuántas veces he tenido que leer comentarios sobre mi vestimenta y aspecto físico. Opiniones sobre qué vestido o peinado usé en cada evento, si repito mis outfits o incluso si uso demasiado escote". Y continúa denunciando: "Esto, obviamente, nunca ha sucedido con ninguno de los otros alcaldes que me han precedido".
Pero ante las reacciones críticas por cuan dura fue con la joven estudiante, se disculpó y explicó su postura: "Respondí impulsivamente sobre cómo me visto y cómo me siento, sin insultar a nadie, pero en un tono demasiado duro. Le pedí disculpas en privado a la joven periodista cuando terminó el acto, y quiero disculparme en público también, porque aunque cada uno tiene sus razones, no me gusta lastimar ni hacer sentir mal a nadie".
Eso sí, no perdió la ocasión para de nuevo reinvidicar su postura: "Ahora que el tema ha trascendido, me gustaría aprovechar la oportunidad para explicarme una vez más: compro mi ropa donde puedo, con mi propio dinero y el poco tiempo que tengo".
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