La presidenta del Congreso, Francina Armengol, ha comparecido este martes de manera urgente para reaccionar a las peticiones de la oposición para que dimita al frente de la Cámara Baja al aparecer su nombre relacionado con la trama de las mascarillas del llamado 'caso Koldo'.
Armengol reconoció que tenía que responder a las duras peticiones de PP y Vox para que renuncie y fue contundente al defender su papel como anteriormente presidenta del Gobierno balear, mandato que coincidió con la época de la pandemia.
"No dejaré que mancillen mi nombre, ni el mío ni el de mi gobierno o la gente que se dejó la piel para defender la salud de los ciudadanos", afirmó rotundamente.
También dejó claro que no recibió "órdenes" ni "presiones" de la trama del 'caso Koldo' o el ministerio que por entonces comandaba José Luis Ábalos para contratar con esa empresa, y que después la contratación se hizo por parte de los técnicos del Servicio Balear de Salud.
Recordó que Baleares, como otras regiones, no tenían mascarillas ni EPI ni otro tipo de material sanitario, y que intentaron comprar donde había dispoinible, en concreto China, y que todas las administraciones competían para hacerse con él. "La política no es embarrarlo todo y sí decir la verdad", reprochó a la oposición.
Las mascarillas de la discordia
Detallando el polémico pedido de mascarillas que hizo Baleares en abril de 2020, Armengol explicó que su gobierno balear encargó mascarillas del tipo FFP2, y que las pidió analizar. "Cuando tenemos los resultados, nos dicen que son mascarillas que no filtran como FFP2, pero que sirven como mascarillas quirúrgicas, y se decide almacenarlas para provisionar material necesario", contó, para después reclamar a la empresa responsable la diferencia de precio que hubieran tenido unas mascarillas de esa prestación inferior.
La reclamación se hizo, aseguró, anteriormente a las elecciones de 2023, "en tiempo y forma", antes del tiempo de expiración de los plazos para hacerlo. La reclamación se formalizó, detalla, en julio de 2023, y que después ya llegó un cambio de gobierno tras la victoria electoral del PP. Armengol asegura que contó al nuevo Ejecutivo las condiciones de esa reclamación, pero que "a partir de ahí es el Partido Popular el que tiene que explicar" qué ocurrió con las reclamaciones por el material defectuoso.
"Ni yo ni mi gobierno estamos siendo investigados", recordó por último, pidiendo al PP que deje de reclamar su dimisión porque "los ciudadanos no merecen estos espectáculos". "No todo vale y quien tiene que dar explicaciones ahora, que las dé, como el expediente de caducidad de la reclamación", zanjó. "No todos los políticos somos iguales", dejó como dardo al PP, a quien acusó de "saltarse todas las fronteras y todas las líneas rojas posibles".
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