Este jueves, el País Vasco amanecía con una alarmante noticia que era la del secuestro de un bebé recién nacido de la maternidad del Hospital de Basurto.
Horas después aparecía el niño, abandonado sobre un felpudo de una casa, y más tarde era detenida gracias a la colaboración ciudadana.
La autora de los hechos era una mujer de 24 años, de unos 1,60 metros de altura, complexión obesa y pelo rizado largo, recogido en un moño. Fue vista por última vez, sobre las 23:00 horas del miércoles con una camiseta blanca de manga corta, unas mallas con dibujos estampados, zapatillas deportivas y un bolso negro con forma de media luna, cruzado a modo de bandolera.
Entró en el hospital vasco y tras intentar sin éxito robar otros bebés, por fin lo consiguió engañando a una madre ingresada, haciéndose pasar por enfermera y diciéndole que se llevaba al bebé de la habitación para hacerle unas pruebas médicas.
La Ertzaintza, junto con efectivos de la Policía Local de Bilbao, puso en marcha un dispositivo de búsqueda de un bebé.
Al parecer, la mujer había estado fingiendo un embarazo en las últimas semanas. Fue detenida 2 horas después de haberse encontrado el niño, que fue dejado sobre el felpudo de una casa. Se lo encontró el habitante de ese hogar, que alertó a la policía. Habían llamado a su puerta tocando el timbre, y el joven se encontró al bebé en el suelo, en perfecto estado de salud.
Según las primeras investigaciones, la autora de los hechos accedió al hospital sobre las 21:00 horas del miércoles y, haciéndose pasar por personal sanitario, secuestró al bebé de la planta de Ginecología y huyó del lugar.
Fue filmada por las cámaras del entorno del hospital. No se descarta una enfermedad mental de la joven para realizar este acto.
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