El anuncio de ayer miércoles de que el Tribunal Constitucional iba a tratar en un pleno de urgencia este mismo jueves el recurso del PP contra la reforma que afecta al Poder Judicial, ha generado un terremoto más en el campo político.
Ese pleno, al parecer, se celebrará a partir de mediodía.
Los sectores progresistas consideran en su versión más extrema que es casi un golpe por parte de unos de los 3 poderes del Estado, como defienden desde Unidas Podemos y otras formaciones de izquierdas.
Desde el PSOE tampoco están nada satisfechos aunque emplean un lenguaje menos extremo. El grupo parlamentario socialista en el Congreso ha presentado un recurso al Tribunal Constitucional en el que solicita que no adopte medidas cautelares contra la tramitación parlamentaria de la reforma del CGPJ.
El PSOE alega que "la adopción de una medida cautelarísima respecto a un procedimiento legislativo en curso en el Congreso de los Diputados, se puede afirmar, sin género de duda, que no pueden existir esos perjuicios de difícil reparación, dado que el procedimiento legislativo no ha concluido y la tramitación proseguirá de acuerdo con las previsiones de la Constitución y de los Reglamentos Parlamentarios".
Medidas cautelarísimas
Y es que el Constitucional podría adoptar hoy mismo medidas cautelarísimas, como solicita el PP, contra la votación del Congreso. Muchos consideran que el hecho de que esta acción sea preventiva, en lugar de limitarse a pronunciarse después sobre su legalidad y constitucionalidad, merma la capacidad de soberanía popular que tiene el Congreso en representación del pueblo, y ejeciendo el Poder Legislativo del Estado.
PSOE y Unidas Podemos exigen al Constitucional que además, en todo caso, no permita votar en este importante pronunciamiento a los 2 jueces Pedro José González-Trevijano y Antonio Narváez, por "tener interés directo o indirecto en el pleito o causa", ya que ambos dejarían de ser jueces del Constitucional si sale adelante la reforma legal.
La portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, desde La Palma, preguntada por la prensa, sí elevaba el tono y tachaba estos hechos de "atropello institucional sin precedentes" y exigía que el Constitucional respete al Parlamento, "sede de la soberanía popular", insistió.
La ministra de Hacienda y número 2 del PSOE, María Jesús Montero, también se pronunciaba en 'Espejo Público' al respescto afirmando que el Constitucional, si toma una decisión en contra de la reforma, "interfiere en la normalidad de la tramitación de una legislación" y "sería un hecho gravísimo".
El origen de la polémica es la enmienda para hacer una reforma que defienden los partidos del Gobierno y sus socios parlamentarios, por la cual se propone pasar de una mayoría de 3 quintas partes a una mayoría simple para que el CGPJ pueda designar a sus 2 candidatos para el Tribunal Constitucional y que cada vocal proponga a 1 candidato en vez de a 2 como se hace ahora.
Si (
No(
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