Según ha adelantado la 'Cadena SER', el Ejecutivo va a aprobar el anteproyecto de ley de Transparencia e Integridad en las Actividades de los Grupos de Interés. Una normativa para elevar la redención de cuentas a la ciudadanía sobre los comportamientos entre las instituciones, empresas y autoridades públicas.
Una de las cuestiones que se pretende endurecer con esta ley son las conocidas como puertas giratorias. Se denomina así a la práctica que muchos políticos realizan tras su retirada o cese de la política en diferentes empresas. Trabajan para influir o asesorar a determinadas empresas que, por lo general, suelen estar muy relacionadas con el cargo público que han desempeñado.
La nueva ley, según el borrador que cita la SER, va a prohibir que "cualquier alto cargo de la Administración -o de su sector público- pueda realizar, tras su cese, labores profesionales de influencia desde empresas o consultoras de asuntos públicos", los famosos 'lobbies'.
Se aprobará en Consejo de Ministros
El mencionado medio ha señalado que el proyecto del Gobierno se aprobará este mismo martes en el Consejo de Ministros. El objetivo es mejorar la transparencia de cara a la ciudadanía y endurecer el acceso a este tipo de prácticas.
El borrador recoge que los Ministros, Secretarios de Estado, Delegados del Gobierno y demás personal tendrán que estar 2 años sin dedicarse a tareas relacionadas con sus competencias.
Este tipo de trabajos son muy comunes en la clase política cuando dejan sus cargos públicos, una práctica que se da en todo el espectro político. Ex ministros o ex altos cargos que fichan en grandes consultoras, en consejos de administración de empresas, en grupos de presión...e incluso algunos fundan las suyas propias.
Para evitar esto, la ley va a ser más dura y establece sanciones como devolver la compensación que reciben tras su cese o la inhabilitación durante 5 años.
Además de un mayor índice de transparencia, la meta de la ley es establecer unas directrices para ejercer de buenas formas estas labores, es decir, la regulación de los 'lobbies'.
La norma define por primera vez lo que es un grupo de interés y crea un código de conducta sobre las relaciones que mantengan con políticos y funcionarios.
Por ejemplo, se va a elaborar un registro oficial donde figuren todas las empresas o personas que "tengan como finalidad intervenir en la toma de decisiones públicas o en el diseño de leyes" para poder comunicarse con el personal de la Administración.
También se pretende que los altos cargos hagan pública su agenda oficial en el Portal de Transparencia.
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