Pablo Iglesias evita ser declarado 'non grato' en Madrid, pero no esquiva la reprobación

Pablo Iglesias asumía este lunes que el "trifachito" del Ayuntamiento de Madrid lo declararía 'persona non grata' a petición de Vox y ya avanzaba el "honor" que le merecía tal nombramiento. Sin embargo, la Secretaría del Pleno ha truncado su gozo al estimar que ninguna norma del ámbito local reconoce esta potestad a un consistorio y que, por tanto, Cibeles no tiene competencias para adoptar tal medida. No obstante, no podrá eludir el exvicepresidente del Gobierno la reprobación por unas declaraciones que la derecha califica como "injurias" a la Policía Municipal y que parte de la izquierda también condena, pero no cree que merezca mayor atención porque supondría "eliminar el foco de los problemas" de la capital.

La Secretaría del Pleno emitió la tarde del lunes un informe jurídico en el que se explicitaba que ni la Ley Reguladora de las Bases de Régimen Local ni ninguna otra conceden autoridad alguna a las entidades locales para declarar 'non grata' a una persona particular. El escrito aludía además a dos sentencias del Tribunal Supremo en las que esta falta de competencia quedaba acreditada. Acto seguido, el portavoz de Vox, Javier Ortega Smith, se comunicó con el registro del Ayuntamiento para pedir una modificación de su propuesta con respecto a Iglesias. "A la vista de las dudas generadas por la Secretaría General del Pleno, y sin entrar en su valoración jurídica, solicitamos que se sustituya el término “non grata” por 'reprobación'". Así se consumó la renuncia de Vox a parte de sus pretensiones, quedando su iniciativa equiparada a la que también han elevado al Pleno Partido Popular y Ciudadanos.

La reprobación saldrá adelante, precisamente, con los votos favorables de estos tres partidos, quienes han cargado con dureza en la última semana contra el exlíder de Podemos por los "insultos" contra la Policía Municipal que este profirió en el podcast La Base el pasado 30 de septiembre. "Con cinco tías como Isa Serra a caballo veríamos correr a toda la Policía Municipal de Madrid. Isa me traería las cabelleras de todos ellos y (Pablo) Echenique y yo las quemaríamos en una hoguera con Arnaldo Otegi en Arralde", manifestó después de que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) suspendiera la ejecución de la sentencia por la que el Supremo condenó a 19 meses de cárcel a la exportavoz de Podemos en la Asamblea de Madrid por un delto de atentado a la autoridad, lesiones y daños a una agente durante un desahucio en Lavapiés en 2014.

"Estamos reprobando unas declaraciones francamente vejatorias", ha aseverado el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, quien ha invitado a elegir entre "un sujeto como Iglesias y una profesional como la policía municipal a la que se afectó en su dignidad". La vicealcaldesa, Begoña Villacís, ha señalado que en Cs "se reprueban las opiniones, pero no se rehaza a las personas". "Nadie se puede atribuir el derecho de decidir que alguien no es bienvenido en Madrid", ha apostillado en una justificación de su negativa a nombrar 'non grato' al exvicepresidente. Esta reflexión, en todo caso, no ha impedido que repruebe a alguien que "no es santo de mi devoción".

La izquierda ve "una cortina de humo"

Para la izquierda, esta operación solo responde a un intento para desviar la atención de cuestiones como la investigación que un juzgado madrileño ha ordenado a la Policía Nacional respecto a las presuntas irregularidades en las oposiciones de la Policía Municipal de Madrid. "El PSOE no va a poner fácil esa cortina de humo que el señor Iglesias ha puesto torpemente en bandeja de plata porque Almeida lo que tiene que hacer es aclarar los casos que están enturbiando la imagen del Cuerpo", ha apuntado la portavoz socialista, Mar Espinar.

En la misma línea, Más Madrid considera que con esta polémica en torno a Pablo Iglesias el Ejecutivo municipal pretende "eliminar del foco los problemas de Madrid". "Las declaraciones me parecen deleznables; se pueden comentar, pero no convertirse en el centro del Pleno", ha agregado Rita Maestre. Así, la portavoz ha acusado al regidor de "secuestrar el debate político". Declarar 'non grato' al exdirigente de Podemos, ha dicho, era "la gran prioridad" de Martínez-Almeida, pero los servicios jurídicos lo han convertido en "un ridículo estrepitoso" para un primer edil que "no habla sobre alquileres, sino sobre una persona que dejó la política hace bastante tiempo".

Luis Cueto, concejal del Grupo Mixto, ha calificado de "broma" las palabras de Iglesias al tiempo que ha deslegitimado a Javier Ortega Smith para plantear reprobaciones. "Alguien que fue reprobado por sus asquerosas declaraciones machistas no está legitimado para pedir que se repruebe a nadie", ha remarcado.