Varios miles de regantes, políticos y representantes de patronales y sindicatos del levante, junto a medio centenar de tractores y camiones, se han manifestado este miércoles frente al Ministerio para la Transición Ecológica en Madrid contra la reducción del trasvase del Tajo al Segura y las consecuencias que eso tendrá para la zona.
La manifestación, organizada bajo el lema "En el levante, sin trasvase, desierto y paro", se protesta por "la muerte del sector agroalimentario del levante español" ante la decisión de establecer un caudal ecológico del Tajo y, por consiguiente, reducir escalonadamente el agua para el trasvase al Segura.
El Gobierno ha estimado una concentración de unos 7.000 manifestantes; frente a los entre 11.000 y 15.000 según los organizadores; que han pedido a la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, que reconsidere su "decisión sectaria y radical de recortar innecesariamente" ese caudal o que dimita.
Un centenar de autobuses y cientos de coches particulares han partido esta madrugada desde Alicante, Almería y Murcia para sumarse a la manifestación, con la que quieren quejarse de la decisión del Gobierno de hace unas semanas de aprobar los planes hidrológicos de cuenca, entre ellos el del Tajo. El objetivo es un aumento progresivo del caudal ecológico de este río a su paso por Aranjuez, de los 6 metros por segundo actuales, a 7 a partir de este año y hasta los 8,65 en 2027.
Uno de los principales representantes políticos en la manifestación es el presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, que ha calificado de "sectaria y partidista" la decisión del Gobierno de elevar el caudal ecológico del Tajo. Advirtiendo también que el 70% de las hortalizas y frutas que se exportan fuera de nuestro país están regadas por el trasvase.
"Si ahora tenemos un grave problema de inflación de los alimentos, imagínese si hay menos alimentos disponibles y con recursos mucho más caros. No es un problema solo de Murcia, es de toda España", ha señalado en declaraciones a los medios a las puertas del Ministerio.
Una situación "insostenible" para la "sociedad levantina"
El Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo Segura (SCRATS), principal organizador de la movilización, tachó la decisión de "totalmente injustificada y sesgada", que provoca una situación "insostenible" no solo para el sector agrícola de estas zonas "sino para la sociedad levantina", según ha asegurado a 'TVE' José Ángel Pérez, secretario general del sindicato.
Los regantes argumentaron que ese plan prevé un recorte paulatino de hasta el 40 % para el año 2027 del agua trasvasada del Tajo que llega al Segura, lo que ha reabierto la "guerra del agua" entre las comunidades receptoras, la valenciana, la murciana y parte de la andaluza, con la castellano-manchega. Los manifestantes han desplegado pancartas en las que se indica "Recorte travase = más paro" ; "más desalación más contaminacion" o "adiós a la huerta de Europa".
Los representantes de las patronales del sector agrario y de empresas exportadoras, sindicatos, empresarios, cooperativas y políticos de varios partidos también se han desplazado a Madrid.
Además de López Miras, ha asistido la consejera andaluza de Agricultura, Carmen Crespo, del PP, la consejera valenciana de esta cartera, Isaura Navarro, de Compromís, el presidente de la Diputación de Alicante y líder del PPCV, César Mazón, así como alcaldes socialistas de Alicante, como el de Elche, Carlos González, o la de Orihuela, Carolina Gracia.
También han estado políticos nacionales, como el líder de Vox, Santiago Abascal, o el diputado de Compromís en el Congreso, Joan Baldoví.
El Gobierno defiende que la prioridad es el uso ambiental y el abastecimiento
Preguntado por las reivindicaciones de los agricultores, el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, ha defendido que los "usos ambientales y el abastecimiento de agua" para uso humano es prioritario respecto a otros usos, como el agrario, según se recoge en la legislación del agua.
"Del Tajo depende el suministro de agua para millones de personas", ha señalado en una entrevista en el 'Canal 24 horas', y ha insistido en que la decisión de aumentar el caudal ecológico responde a 5 sentencias del Tribunal Supremo que obligaban al establecimiento de este caudal, "una garantía ambiental".
También se ha pronunciado al respecto el presidente de Castilla-La Mancha, el socialista Emiliano García-Page, quien ha recordado que "el Tajo es el único río en España que no tiene caudales ecológicos establecidos por ley". Ha afirmado que su comunidad "va a seguir siendo solidaria con el resto de España y no va a faltar agua para el consumo humano", pero ha alertado de que "estamos en una situación crítica y que va a peor".
García-Page ha manifestado que en los 44 años de vida del trasvase han cambiado aspectos ambientales y de cambio climático, mientras que en el levante llevan 44 años "sin moverse ni un centímetro cúbico" de sus posiciones, y esto "no puede ser".
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