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Todos los actores del sector turístico coinciden: 2009 será un año difícil pero con potencial para hacer de esa actividad un motor importante de la economía nacional.
Autoridades de los tres niveles, así como legisladores y empresarios coinciden en que la adecuada promoción, la suma de esfuerzos y flexibilidad serán las claves para mantener números negros en medio de la crisis.
Al respecto, la Secretaría de Turismo ha dado a conocer algunos planes concretos. El gobierno federal reorientará su inversión en promoción básicamente hacia el mercado estadunidense, de donde procede la gran mayoría de los visitantes extranjeros.
De los mil 675 millones de pesos de que dispondrá en 2009 el Consejo de Promoción Turística de México 59 por ciento se destinará al mercado internacional y el resto al nacional; esta cifra es 4.5 por ciento mayor que en 2008.
Según anunció el secretario del ramo, Rodolfo Elizondo Torres, en la Feria Internacional de Turismo realizada la última semana de enero de este año en Madrid, España, 80 por ciento de la promoción se orientará al turismo cultural.
La intención es diversificar mercados aprovechando que los destinos de sol y playa están bien posicionados, por lo que se intentará que más gente sepa en el mundo que México ofrece, además de maravillosas playas, otras muchas alternativas.
El Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) también mantiene en marcha un importante proyecto de apoyo a las inversiones turísticas en Huatulco, Oaxaca, cuyo relanzamiento efectuado en marzo del año pasado ha significado un importante crecimiento.
Se espera que durante 2009 las inversiones en ese destino turístico aumenten y se convierta en un polo importante de atracción, mientras continúan las obras de la carretera desde Oaxaca que facilitará la comunicación.
Además, a mediados de febrero el presidente Felipe Calderón colocará la primera piedra en el nuevo Centro Integralmente Planeado que se ubicará en Escuinapa, Sinaloa.
Ahí el gobierno federal invertirá más de cuatro mil millones de pesos y las obras de infraestructura comenzarán este mismo mes para generar empleos primero y, posteriormente, crear la posibilidad de inversión en hotelería y servicios.
El presidente de la Confederación Nacional Turística (CNT), Miguel Torruco Marqués, señaló en entrevista que éste puede ser un año muy importante para el sector, pues podría demostrar su capacidad de adaptación y de generación de riqueza.
Recordó que envió al presidente de la República una carta en donde le pide apoyar a este sector, que consideró puede generar un crecimiento de 1.5 por ciento, aunque la economía en su conjunto caiga a menos uno por ciento.
El líder hotelero explicó que si bien algunos proyectos de inversión se han detenido, esa circunstancia puede favorecer que haya mayores márgenes de ocupación en los servicios ya existentes.
Hay 138 destinos con vocación turística en México y los mexicanos en época de crisis preferirán destinos más cercanos, lo que representa una oportunidad para esta industria que emplea a más de dos millones 730 mil personas.
Incluso observó que la propia crisis implica cambios de hábitos que pueden significar oportunidades para algunos subsectores del turismo.
Por ejemplo, muchas compañías están buscando hospedar a sus empleados en viajes de trabajo en hoteles más baratos, lo que significa una oportunidad para los establecimientos de cuatro y tres estrellas.
En ese sentido, la cadena hotelera City Express anunció recientemente que en este año abrirá 14 establecimientos con la intención de llegar a 50 hoteles en 42 plazas.
Precisamente dicha cadena anunció que entre esos 14 lugares habrá por lo menos tres con precios de 400 pesos la noche, dirigidos a personas que van a trabajar y no desean pagar lujos, aunque sí merecen un lugar digno dónde descansar.
El secretario de Turismo del Distrito Federal, Alejandro Rojas Díaz Durán, propuso a su homólogo a nivel federal la creación del concepto "Luna y Cultura", una alianza de varias ciudades para diversificar el turismo.
En entrevista explicó la estrategia: unir los esfuerzos de varias ciudades del interior del país para crear circuitos turísticos con atractivos nuevos y no relacionados con los clásicos destinos de playa.
"Lo que buscamos es captar a turistas interesados en la cultura los espectáculos de buen nivel, el ecoturismo, la naturaleza, las convenciones; gente que venga de otros países no sólo a conocer Cancún, sino realmente a México".
La idea es sumar al mayor número posible de gobiernos locales y empresarios para ofrecer más alternativas turísticas no sólo a los extranjeros, sino también a los mexicanos.
La crisis, dijo, puede también significar una importante oportunidad, pues aunque la gente tenga menos dinero no dejará de viajar, y ahí es donde los destinos cercanos a los turistas pueden volverse más atractivos.
En esa misma línea, el presidente de la Asociación Mexicana de Agencias de Viajes, Noé Elizarrarás, anunció que a partir de la próxima semana los agentes de viajes del país echarán a andar un programa piloto en conjunto con el gobierno capitalino y la CNT.
Explicó que "todos los jugadores del sector turístico" (restauranteros, hoteleros, guías de turistas, parques recreativos y otros proveedores de servicios) armarán paquetes para atraer a turistas del interior de la República.
Con el apoyo de la Secretaría de Turismo del Distrito Federal y de la Confederación Nacional Turística, los agentes de viajes promoverán los paquetes a nivel nacional e internacional a partir de la próxima semana.
"Revisaremos los resultados cuando concluya el primer semestre del año para hacer los ajustes necesarios y, en todo caso, repetir el esquema con otras entidades del país", adelantó.
El presidente de la Comisión de Turismo de la Cámara de Diputados, Octavio Martínez, señaló la importancia de que este sector cuente con los recursos suficientes para operar como debe hacerlo.
En ese sentido, sostuvo en entrevista, la Cámara baja consiguió que para 2009 la secretaría del ramo operara con un buen flujo de recursos, a pesar de la situación del país.
Incluso, recordó que de última hora se logró evitar un recorte considerable que preveía el proyecto original de presupuesto a los recursos del Consejo de Promoción Turística de México, que iban a ser canalizados al Instituto Nacional de Migración.
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