El Puente

Hay mil cosas que se pueden hacer durante este puente de San José. Por ejemplo: olvidarse durante unos días de la comisión de investigación de los espías, que por mucho carpetazo que le hayan dando, seguirá pedaleando a la vuelta. Ya verán.

Por ejemplo: olvidarse durante unos días de las investigaciones del Juez Garzón, de los alcaldes y de los ex alcaldes, de los sastres y de los ex sastres. No sé si servirá para ponerse más moreno pero seguro que alivia.
Por ejemplo: olvidarse durante unos días de que ya no queda ningún equipo madrileño en la Champions. Mal de muchos, consuelo de madridistas y atléticos.

Por ejemplo: olvidarse durante unos días de los dimes y diretes en Caja Madrid, de la falta de respeto de unos y de otros por los clientes y de la escasísima responsabilidad que tienen todos aquellos que, según está el patio económico, se dedican a tensar y tensionar en un ejercicio negligente sin precedentes

Por ejemplo: olvidarse durante unos días de la situación económica, de la crisis, del paro y hasta de las huelgas. Si son usuarios de Metro prepárense: a la vuelta, la semana que viene y si nadie lo remedia tendremos paro en el suburbano.

Pero si todos estos ejemplos son pocos, deben darse con un canto en los dientes. Si se van de puente, seguramente es porque su situación económica se lo permite. Es el primer ‘gran puente’ de la crisis (Mediavilla Dixit) y será un buen barómetro para saber como andamos de ánimos los madrileños. Seguramente habrá atascos, pero seguramente habrán notado últimamente que la hora punta es menos hora punta. Es lo que tiene que cada día se queden en el paro en Madrid más de 700 personas. Esos son muchos coches menos en el atasco. Incluso en el del Puente.