Llegó septiembre

A lo tonto, a lo tonto, ya estamos en septiembre. Parece que fue ayer cuando estábamos en agosto con el cubo y la pala en la playa. ¡Pero que va! Ya estamos en septiembre, en el noveno mes del año y por si quieren un consuelo ya queda mucho menos para el próximo puente que es el del Pilar: les hará falta ánimo porque este año no es fiesta Santa María de la Cabeza. Pero no se preocupen que el 12 de octubre ya está aquí, la Navidad la tenemos en casa, y las bufandas, la manga larga y las pellizas están a la vuelta de la esquina. El que no se consuela es porque no quiere.

Septiembre es sin duda el mes en el que más cosas cambian. Y no sólo se trata de que haya que pagar los parquímetros por la tarde otra vez. En septiembre arranca en serio el año por mucho que se empeñe el 31 de diciembre. En la medianoche del 31 de agosto al 1 de septiembre no hubo campanadas – bueno: sí las hubo, pero no tomamos uvas – pero arrancamos la temporada 2009-2010 esa que seguro que les martiriza un año más en el album de cromos de la liga de turno. El Año Nuevo comienza realmente ahora con los propósitos que nunca cumplimos y que suelen pasar por aprender inglés, apuntarse al gimnasio y adelgazar, o acabar aquel coleccionable que tanto le llamó la atención el septiembre pasado. Y en el caso de nuestros políticos regionales el propósito puede pasar por enrollarse menos y porque se les caliente menos la boca.

Pero septiembre es sobre todo un buen momento para saber por donde van a ir los tiros de los próximos meses en los que a la actualidad se refiere. Y en ese caso, la verdad es lo que tenemos muy claro: la actualidad de los próximos días, semanas y meses va a estar marcada por la Gripe A mal que nos estornude. A estas alturas del cuento ya deben saber que el mensaje de las autoridades sanitarias es tranquilizador: que no supone un riesgo de mortalidad superior al de otras gripes estacionales. Pero a la vez, las autoridades se están encargando de contarnos en tiempo real todos los detalles. Y eso no necesariamente tranquiliza.

Llegó septiembre. Y aquí estábamos esperándole. Consuélense: al menos este mes tiene sólo 30 días.