Así las cosas, y según el diario
La Razón, de realizarse elecciones, el PSOE perdería entre 16 y 18 diputados y pasaría de los 169 que logró en las elecciones de marzo de 2008 a obtener entre 151 y 153. Por su parte, el PP aumentaría entre 11 y 13 sus parlamentarios en el Congreso, mejorando los 154 escaños actuales hasta los 165 o 167 que tendrían respaldo en las urnas en este momento.
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Igualmente, los populares logran al finalizar el mes de noviembre la mayor ventaja con respecto a los socialistas desde marzo de 2008, un total de 4,77 puntos. Por el contrario, el PSOE retrocedería 6,09 puntos, ya que pasaría del 44,36% al 38,27% del voto válido. La pérdida exacta de votante sería de 1.766.335, al pasar su electorado de 11.289.000 a 9.523.000.
Las principales razones del descenso socialista hay que buscarlas en la abstención, que le privaría de 790.000 votos, y el tirón del PP, que le arrebataría 658.000 electores. Por otro lado, el electorado socialista que se pasaría a las filas del PP engrosaría el 43,04% de los votos populares, 2,65 puntos más que en los anteriores comicios, al pasar de 10.278.010 votantes a 10.708.000.
Perspectivas más optimistas para el PSOE, en Público
Para este periódico, sin embargo, el PSOE reduce los 5 puntos de ventaja que el PP había conseguido acumular a mediados de octubre y se quedan en 1,6 en diciembre, hasta el punto de lograr casi un empate técnico entre las dos grandes formaciones. La situación ha retrocedido al mes de junio, cuando el PP tenía un voto estimado del 41,8% y el PSOE del 40,3%.
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El recorte, en esta ocasión, es consecuencia de una tibia tendencia al alza de los socialistas, y, sobre todo, de la baja continuada de los conservadores. De hecho, el 39,6% del PP representa su estimación menos favorable desde el pasado mes de enero. El Publiscopio de diciembre muestra que, además del PSOE, mejoran sus expectativas de voto UPyD e IU. Ambas formaciones consiguen, de hecho, sus mejores resultados de los últimos nueve meses.
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