Egipto: más trágala que elecciones

Las elecciones generales egipcias del domingo último constituyen la mayor aberración democrática del mundo más o menos parlamentario imperante en las naciones en vías de desarrollo: la participación popular será del 10%, según todas las encuestas (habitualmente es del 20%); toda la oposición, menos los Hermanos Musulmanes, boicoteó los comicios y la única alternativa parlamentaria está dentro del partido gubernamental -el Partido Nacional Demócrata, el PND- y la constituye el ala progresista del mismo... ¡ que encabeza el hijo del presidente actual, Hosni Mubarak !

Formalmente a estos comicios -en Egipto se celebran cada 5 años- se presentaron también una serie de partidos menores, pero no constituyen más que agrupaciones satélites del PND para generar la impresión de una oferta política pluralista.

La figura más popular de la oposición egipcia es El Baradei, ex director de la Agencia Internacional para la Energía Nuclear, y ha sido uno de los más enérgicos promotores del boicot por considerar que estas elecciones ni eran libres ni los políticos disidentes tampoco.

El que los Hermanos Musulmanes -partido prohibido- presente candidatos que el Gobierno acepta pese a la prohibición se debe a que una fracción de este partido cree que las reformas desde el Parlamento son más fáciles y rápidas que desde la oposición extraparlamentaria

Si a ello se añade que el PND viene gobernando ininterrumpidamente desde hace 37 años a base de fraudes electorales y persecuciones de los dirigentes de la oposición, la bajísima participación popular en las consultas electorales queda más que explicada.

Pero si al pueblo egipcio le importa un rábano estos comicios, en cambio para Hosni Mubarak son importantísimos. Y es que el año próximo se celebrarán elecciones presidenciales y en Egipto al presidente no le elige el pueblo, sino los miembros de las dos Cámaras. Ello ha determinado al PND a proceder con infinitos "miramientos internos" en estas legislativas hasta el extremo de que ni siquiera ha presentado una lista oficial de candidatos a los 509 escaños; cualquier militante del PND podía presentar su candidatura.

Porque así, no discriminando ahora a nadie,, en las presidenciales del año próximo ninguno de los diputados podrá tener cuentas pendientes con Hosni Mubarak y negarle su ¡sexta reelección!...