Las ventas de vino embotellado bajo el marchamo de la Denominación de Origen Jumilla han registrado un aumento del 9,26 por ciento en 2010 con respecto al año anterior.
Así, a fecha de 31 de diciembre de 2010, las 42 bodegas que están inscritas en este Consejo Regulador habían vendido 18,7 millones de botellas de vino, lo que supone 4,7 botellas más que en el año anterior.
Un balance que, según la D.O. de Vinos de Jumilla, además de ser "positivo" por el aumento, "es importante porque mantiene la tendencia al crecimiento en los lineales del embotellado que esta denominación viene experimentando en los últimos años, en detrimento de las ventas a granel".
De ahí que no hayan dudado en afirmar que "esta tendencia está haciendo realidad lo que desde hace años se señalaba como un sueño por el que continuar trabajando, ya que el de granel cede mientras las ventas de vino con el marchamo de DO Jumilla se abren paso en los mercados de todo el mundo".
En lo que respecta a las expectativas para este año de los mercado, las fuentes apuntan que las previsiones que se mantienen en la DO Jumilla es que "se podrá mantener lo alcanzado con posibilidad, incluso, de crecer".
Y es que, han subrayado, "si se centran los datos solamente en exportación, el año 2010 ha terminado posicionando a Estados Unidos, Alemania, Reino Unido y Japón como los principales destinos de los vinos exportados como DO Jumilla".
"Si bien es todavía una utopía con conseguir traducir toda la uva que se elabora en vinos de DO, sí es una buena señal que las bodegas de esta denominación estén consiguiendo aumentar, hasta niveles antes nunca alcanzados, la comercialización de vinos embotellados bajo el DO Jumilla", han indicado.
Los factores que apoyan estas positivas cifras son la ya "excelente" relación calidad-precio de los vinos DO Jumilla que está siendo decisiva para enfrentar la crisis; la apuesta "firme y decidida" por los vinos de Monastrell, variedad que aporta su sello diferenciador y autóctono sirviendo así de aval al consumidor ávido de vinos diferentes y el contar con un mayor número de bodegas, apostando con firmeza por comercializar vinos de calidad embotellados, "algo que sería imposible sin el trabajo esmerado de cada uno de los 2.700 viticultores que tiene la Denominación de Origen Jumilla".
Pese a que el camino por recorrer para conseguir el equilibrio y rentabilidad en todas las partes que forman este sector "es todavía largo, noticias como éstas deben servir para tomar aliento y tener confianza en el que futuro anhelado es cada día más presente".
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