www.diariocritico.com
La lealtad como chantaje

La lealtad como chantaje

lunes 02 de julio de 2007, 17:07h

A la hora de escribir esta crónica, no ha comenzado aun el debate sobre el estado de la nación. No voy a hacer bromas -porque no creo que sean veraces- tipo "¿de qué nación exactamente? Pero si me preocupa que, una vez más, se confundan las cosas y se tergiverse algo tan serio como el concepto de lealtad. Viene esto a cuento de lo que ayer mismo anunciaba o advertía o amenazaba Patxi López, líder de los socialistas vascos: "Si el PP utiliza el terrorismo en el debate, esteremos en el mismo punto de deslealtad" y esta, me temo, va a ser la argumentación del PSOE y los grupos parlamentarios dispuestos a corearle. Naturalmente lo mismo se podría decir de nuestra política exterior, lo cual significaría no "utilizar" lo ocurrido en el Líbano o de lo que está a la espera de pronunciamientos judiciales por lo que tampoco se podría "utilizar" el polémico estatuto de Cataluña. Pero vayamos a los hechos. 

   ¿Que es exactamente "utilizar" el terrorismo? O la misma pregunta pero al revés que resulta aun más inquietante: ¿qué sería "no utilizar" el terrorismo en el debate? Pues nada menos que pasar sin mojarse sobre una de las apuestas más fuertes de este Gobierno que, para desgracia de todos, no ha salido bien y contra la que siempre ha estado el principal partido de la oposición. No "utilizar" el terrorismo sería cerrar los ojos no ya a las cosas que dice "Gara" sino a las noticias que hoy mismo publican en sus primeras páginas  prácticamente todos los periódicos nacionales incluidos los más afines al Gobierno y que son el tema de conversación de buena parte de la sociedad española. No "utilizar" el terrorismo sería, en definitiva, una prueba no de lealtad sino de estupidez política y de traición a nueve millones de personas que votaron a un partido que desde el principio se opuso no a terminar con el terrorismo sino a las negociaciones políticas con la banda ETA. Si el llamado proceso de paz hubiera terminado bien o siguiera al menos su camino sin T-4, sin comunicados de fin de tregua y sin descubrimientos de la prensa ¿utilizaría semejante éxito el partido en el Gobierno o por lealtad ni haría mención al tema?

   Y hay otro tema aun más espinoso porque toca un techo de cristal roto ya para mucho y que amenaza ruina para otros: la lealtad o es mutua o no se puede exigir. Y no me refiero a la que haya tenido o haya dejado de tener el Gobierno con el PP, allá ellos, sino a la que se ha tenido con la sociedad española. Sistemáticamente el Ejecutivo de ZP, empezando por su presidente y terminando por Rubalcaba, aquel que en su día clamaba que este pueblo no se merece un gobierno que miente, sistemáticamente, insisto, este Gobierno ha venido ocultando la verdad del proceso, satanizando a quienes se aventuraban a descubrir hechos, negando una y otra vez una realidad terca que sigue ocupando, como decía antes, las primeras páginas de todos los periódicos. Y uno entiende que haya que callar muchas veces para lograr unos objetivos dignos, entiende que la discreción es básica en todo proceso negociador y que en algún momento -sólo en algún momento- incluso se tenga negar una verdad en aras de lograr algo tan legítimo y deseado como la paz. Pero no es el caso. El Gobierno de ZP ha mantenido la farsa no para lograr esa paz sino para no reconocer el fracaso y cuando después del atentado de la T-4 todos esperábamos que se pusieran las cartas boca arriba, se siguió ocultando la verdad y despreciando a quienes la descubrían. Y en eso siguen.

   Lo de Patxi López a estas alturas no es más que un chantaje a la oposición porque el barco, por desgracia, no está sólo tocado sino hundido.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios