San Isidro y Las Ventas: plus y plas

1º) PLUS: La responsabilidad y sentido común de un sector de toreros que han estado a la altura, o casi, del prestigio y categoría de Las Ventas, foro y espejo de las plazas más significativas del universo taurino. Su aptitud y actitud frenan las profanas, ambiguas o pagadas embestidas antitaurinas, y callan caducos tòpicos corporativistas. En especial quiero felicitar a varias cuadrillas  por el conjunto de sus actuaciones en la brega, banderillas y puyas. A los múltiples premios establecidos, hay que añadir el premio a la mejor cuadrilla. El arte de torear suele ser individual pero es el resultado final de un trabajo colectivo. PLAS: La irresponsabilidad o dejadez de otro sector de toreros que ni en este ciclo, ni en anteriores, han llegado a los mínimos que exige o debe exigir la profesión y la primera plaza del mundo. Hay que hacer autocrítica, hay que meditar, hay que madurar, hay que descansar. Hay que retirarse. 2º) PLUS: La mala suerte de algunos toreros con los toros que les tocaron en suerte. La brevedad con torería en trasteos a toros sin fondo, se agradece. PLAS: La mala suerte de algunos toros con toreros que no les han “tocado o sobado” con sabiduría para lidiarlos y torearlos apropiadamente. La cansina y repetitiva insistencia de sacar faena donde no la hay, o de plantearla y expresarla casi  al revés de lo que le “pide” el toro. 3º) PLUS: Tres toreros han salido a hombros por la Puerta Grande. Dos, por cortar dos orejas al mismo toro. Uno, por cortar una oreja a cada uno de su lote. Sin fallo a espadas pudo haber una o dos salidas más a hombros, pero… con parecidos baremos. PLAS: La concesión de dos orejas del mismo toro, se debe hacer, cuando hay lucimiento excelso en todos los tercios y suertes que forman y conforman la unidad de la lidia y del triunfo auténtico. Sin torear de capote o hacerlo con vulgaridad, y descargando la suerte en la continuidad de pases y series de muleta en la mayoría de las intervenciones, es devaluar y degradar la grandeza y el mérito del único arte vivo que hay. Es en el toreo de capote donde dos o tres  toreros miden su épica, ética y estética con el mismo toro. En la inmensa mayoría de los casos aparcan esos principios fundamentales y esas obligaciones morales. Y no es lo mismo cortar una oreja en el límite con la vuelta al ruedo, que cortarla con insistente petición de la segunda. En estos casos, los triunfos se quedan en éxitos y los éxitos en exitillos pasajeros. En el larguísimo y lánguido Ciclo Primaveral Taurino no ha habido triunfos de los que lanzan o consagran de verdad a los toreros. Hay que restar festejos en el Ciclo Primaveral y sumarlos al Ciclo Otoñal. Se torea desde la naturalidad, la  pureza, el don y la maestría. Se destorea desde posturas o posturitas ventajistas, exageradas, oportunistas, artificiales o efectistas y defectistas. 4º) PLUS: En general, el peso de los toros se ha correspondido con su esqueleto. El volumen no va ligado a la energía y el trapío. Han salido por toriles 15 o 20 toros de máxima toreabilidad. PLAS: El trapío además de la armónica y equilibrada  proporción de la forma  ha de tener movilidad y emotividad de fondo. Los toros bravos-bravos de trapío integral que hemos observado se pueden contar con los dedos de una mano. Los toros modernos con toreabilidad para modernas salidas a hombros han derrotado a los toreros y toreos modernos con demasiada holgura. Los toreros y los toreos son derivados de los toros: con toros bravos hay toreros y toreos bravos, y con toros raros hay toreros y toreos raros…son los que abundan. 5º) PLUS: Los llenos o casi llenos en la Feria de San Isidro. Las medias o tres cuartos de entrada en las otras ferias o verbenas con carteles que fuera del Ciclo Primaveral apenas convocan a un cuarto de feligreses en los tendidos. PLAS: Ante la mediocridad o decepción de la mayoría de los festejos, a los espectadores circunstanciales se lo ponen difícil para hacerse aficionados. La Corrida de la Beneficencia hay que confeccionarla al margen de ciclos, verbenas y ferias. 6º) PLUS: Han asistido, por separado, a Las Ventas, el Príncipe Felipe y la Princesa Elena, dando un simbólico apoyo al hecho taurino.PLAS: Hay que detectar el gafe o los gafes que les impide presenciar corridas gloriosas y reales. 7º) PLUS: La programación de la  feria la vendieron como histórica. En la primera parte hubo ambiente, ilusión y mucho triunfalismo. No se si tuvo algo que ver la convocatoria de elecciones. PLAS: Mucho triunfalismo y pocos triunfos, esa es la pura verdad. No hace falta ser un genio como González, Aznar, Zapatero o Rajoy, para pronosticar resultados a la baja o del montón. Varias tardes pusieron un esperpéntico chiringuito del repetido partido político ganador con loritos de discursillos enlatados, faltones, frívolos, embusteros y ruidosos; regalaban artilugios plastificados de recuerdo; un incordio. Un poco más allá dos periódicos que piden austeridad a los gobiernos, regalaban miles de ejemplares para desesperación de los que venden almohadillas; una contradicción. A las 20,30 encendían la luz artificial y había luz natural para exportar en el ruedo y en las gradas hasta las 21,30; un despilfarro. Los transportes públicos tardaban en darnos servicio dos o tres veces más de lo normal, con las apreturas y olorcillos nos acordamos de los líderes, lidercillos, parientes, fanáticos y loritos chiringoteros. Otra tomadura de pelo. No entiendo como hay “comunicadores” que toleran chiringuitos en la explanada de Las Ventas y denuncian acampadas en explanadas de Puertas de Soles, de Lunas, de Necesidades. 8º) PLUS: Es la última temporada que la actual empresa explota o gestiona el ocio y negocio de Las Ventas del Espíritu Santo y del Pueblo de Madrid. PLAS: Los que eligen a los próximos emprendedores, empresarios o especuladores son los mismos que eligieron a los vigentes. Me temo que solo sea un quito y pon rutinario. Veremos y analizaremos la eficacia, transparencia y resultados de promesas y trabajos…sin fin. Se acabó la chulería insolente del “hago lo que me da la gana” en asuntos… transcendentes. A pesar y medir el exitillo –uno de cada cuatro votos posibles- en las urnas. Porque existe el efecto bumerán, y donde las dan las toman. Al tiempo