Madrid alcanza un valor de 127 puntos sobre una media nacional equivalente a 100 en el ranking de competitividad, según un estudio elaborado por el catedrático de Economía José Villaverde Castro para la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) y que publica 'Papeles de Economía Española'.
En él se define la competitividad regional como la capacidad para asegurar el crecimiento económico a lo largo del tiempo, lo cual incluye la capacidad para atraer y retener capital productivo y recursos humanos cualificados, así como la capacidad de la región para ser innovadora.
En su informe el catedrático no sólo ha tenido en cuenta el indicador simple y más tradicional, que es el Producto Interior Bruto (PIB) per capita, sino también factores como la productividad, la tasa de ocupación, la tasa de actividad, la escolarización, los usuarios de internet o la penetración de la banda ancha.
La puntuación más alta, de un 132,1, la alcanza la región madrileña en el indicador de desarrollo y creatividad, que se refiere a la productividad del trabajo, el capital tecnológico interior, el empleo y los gastos en actividades de I+D en empresas y el porcentaje de escolarización.
En este grupo de indicadores el País Vasco se sitúa en el 121,1, Navarra, en el 114,4, la Rioja en el 11,4 y Cataluña, en el 110. A la cola están Canarias, con 84 puntos, Galicia, con 83, Murcia, con 82 y Extremadura, 78.
En opinión del profesor para que una región sea competitiva "es imperativo que asegure condiciones de localización atractivas no sólo para las empresas sino también para las personas, lo que significa tener capacidad de anticipación y adaptación a los retos económicos y sociales".
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