En la ceremonia se recordó el momento en que comenzó la "historia íntima" de Mario Vargas Llosa con Francia: 1957, año en que el escritor ganó un concurso de novela organizado por La Revista Francesa, por un relato titulado "Leonidas", cuyo premio consistió en un viaje a París.
Luego de efectuarse un repaso de algunas anécdotas ocurridas tras ese importante hecho y que vinculan al escritor con Francia, como haber trabajado para la agencia France Press y la Oficina de Radiodifusión y Televisión Francesa, se destacó su imaginación y exuberancia latinoamericana, las cuales han contribuido a la originalidad de sus exitosas novelas como "La Ciudad y los Perros", "La Guerra del Fin del Mundo", "La Tía Julia y el Escribidor", "Conversación en la Catedral", "La Fiesta del Chivo", entre otras.
La ceremonia de condecoración se realizó en la Residencia de la Misión de Francia ante las Naciones Unidas y contó con la presencia de distinguidos asistentes, tras lo cual el Representante Permanente del país galo, Sr. Jean-Maurice Ripert ofreció un almuerzo.