La instalación de 180 semáforos “inteligentes” acompañados de cámaras de vigilancia, es parte de una transformación profunda de la vialidad urbana de la ciudad de Panamá, en conjunto con un ambicioso plan que incluye el saneamiento de la bahía y la construcción de la Cinta Costera, que dotará a la urbe de un perfil moderno y eficiencia en el tráfico rodado.
Los semáforos posibilitarán una circulación controlada desde un centro ubicado en la plaza de la Lotería, que ordenará los semáforos de acuerdo a volúmenes y horas pico. Al mismo tiempo, el ministerio de Obras Públicas está reconstruyendo y reparando todas las calles y avenidas de la ciudad, y construyendo pasos elevados y conexiones a desnivel en los cruces más importantes.
El gobierno espera tener todos estos proyectos terminados cerca del mes de agosto de 2009, cuando esté finalizando el periodo presidencial de Martín Torrijos. Se trata de integrar una serie de acciones y proyectos, para que la ciudad esté a tono con el desarrollo inmobiliario, el crecimiento demográfico, la modernización, las inversiones y la ampliación del Canal de Panamá, que en conjunto impulsarán a Panamá hacia el primer mundo.
Los organismos financieros internacionales, la ONU y diferentes clasificadoras ven con interés el crecimiento económico de Panamá, y vaticinan que será uno de los pocos países que cumplirá las Metas del Milenio.
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