En un comunicado en redes sociales, la representación del Dalái Lama ha pedido disculpas oficiales por el polémico gesto que ha dado la vuelta al mundo, en el que besó en la boca a un niño indio y le pidió que le chupara la lengua.
La nota oficial del culto budista tibetano explica: "Ha circulado un vídeo que muestra un encuentro reciente, en el que un niño le pregunta a su santidad el Dalái Lama si puede darle un abrazo. Su santidad desea pedir disculpas al niño y a su familia, así como a sus muchos amigos de todo el mundo, por el daño que sus palabras han causado".
Además, intenta quitar hierro al asunto recordando su carácter bromista, que en esta ocasión ha podido excederse, pero asegurando que sin mala intención: "Su santidad a menudo toma el pelo a las personas que conoce de forma inocente y traviesa, incluso en publico y ante las cámaras".
El mundo occidental no entendió el gesto ni que se hablara de una broma y ha condenado el beso, tachándolo prácticamente de abuso sexual a un menor que no tenía la capacidad ni la independencia necesaria para afrontar el momento y negarse a ello.
Problemas en el pasado
El gesto no ha quedado desapercibido porque, como pasa en la Iglesia católica, es habitual ver a monjes budistas a cargo de menores, muchos de ellos futuros monjes también. Además, ha habido casos de abusos sexuales a menores en el pasado, por los cuales ha tenido que responder el Dalái Lama como máximo responsable de este culto.
De hecho, recientemente se reconocieron oficialmente casos de abusos desde los años 1990 en templos budistas, por lo que el Lama se disculpó públicamente.
Gyatso es premio Nobel de la Paz y es el 14º Dalái Lama de la historia, aunque nació bajo el nombre de Lhamo Thondup en el Tíbet, antes de la anexión de China.
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