Elogios monárquicos a un Rey cansado que ofreció en la Pascua Militar el gesto más débil que se le recuerde

Si esa fue la excusa de Zarzuela, por su parte, en la prensa, hay muchas voces que analizan de forma trascendental lo ocurrido.

Por ejemplo, el diario EL MUNDO señala en su portada que el Rey "balbuceó y se equivocó en su discurso", y aprovecha esas dificultades del monarca para titular: "España, titubeante". Este periódico añade que "ni el ministro de Defensa ni el Rey aludieron a la secesión de Cataluña ni a la reunión de asesinos etarras entre cuyas víctimas hay decenas de militares y guardias civiles".

En la misma línea, LA RAZÓN titula: "El esfuerzo del Ejército... y del Rey", y añade que a Don Juan Carlos "le pudieron los nervios por su reaparición" en su primer acto fuera de Zarzuela.

EL PAÍS titula en portada: "El Rey defiende ante la cúpula militar los recortes en el Ejército", y se refiere también a los "titubeos" de Don Juan Carlos durante la lectura de su discurso.

"El Rey, fatigado en su reaparición pública, destaca el ejemplo de los militares", titula ABC.


Editoriales

En las cartas de opinión de algunos diarios éste es también el tema del día. EL MUNDO titula su editorial así: "Los titubeos del Rey, metáfora de los del Gobierno". Y argumenta: Muchos ciudadanos esperaban que en su primer discurso de 2014 el Rey hiciera alguna referencia al desafío independentista lanzado por Artur Mas, así como a la reunión de expresos de ETA excarcelados por la derogación de la doctrina Parot. Había sobradas razones.

Y considera que se reabre el tema sucesorio: Don Juan Carlos balbució ostensiblemente en varias ocasiones. Es un serio contratiempo para la Casa Real y reabre las dudas sobre su recuperación y la capacidad para ejercer la Jefatura del Estado. "Pero lo peor de esos problemas físicos es que son la metáfora de los titubeos políticos del Gobierno".

LA RAZÓN le elogia, sin más: Ha sido el Rey, como jefe de las Fuerzas Armadas, quien reconoció en su discurso con motivo de la Pascua Militar el "enorme esfuerzo" por mantener la capacidad operativa necesaria para "garantizar la seguridad y la defensa de nuestra patria" en un momento de recesión económica. El Ejército no es sólo una estructura organizativa compleja y altamente tecnificada, sino también la voluntad de servicio de miles de hombres y mujeres que guían su trabajo según el principio de ser los primeros en ofrecer y los últimos en recibir. Así lo destacó Don Juan Carlos en el primer acto oficial tras su última intervención "algo que no hizo sin esfuerzo, que no pudo ocultar".

Por su parte, EL PERIÓDICO considera que fue "signo de normalidad y serenidad", en clave más política por el tema catalán: El Rey se limitó ayer, en su discurso de la Pascua Militar, a ensalzar a los militares por su esfuerzo a amoldarse a unas restricciones de los presupuestos públicos que sufren el conjunto de los ciudadanos españoles.



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