La gran protagonista de la jornada fue la alcaldesa de Valencia,
Rita Barberá, aunque por la polémica. Dio por hecho, por despiste o no, que Camps recibió trajes de la trama corrupta Gürtel al opinar que
“todo el país, empezando por el presidente del Gobierno” debería entonces dimitir, porque
ZP recibe como
“dádiva” anchoas de Santoña del presidente cántabro,
Miguel Ángel Revilla cuando éste le visita en Moncloa.
Es también el tema clave en la prensa: los diarios destacan el silencio de
Rajoy, que denegó hacer declaraciones sobre
Camps, y el
“cerrojazo informativo” oficial en el PP, aunque citan fuentes de Génova que consideran que el auto es
“insuficiente” y
“no tiene pruebas”, y dan por seguro que Camps no se sentará en el banquillo ya que las acusaciones a las que se enfrenta son “menores”. Estas fuentes -cuyas declaraciones citan todos los diarios- sostienen que
“la cacería por la que dimitió el ministro Bermejo cuesta bastante más que los cuatro trajes” y que el valor de esos trajes es inferior al de muchos regalos que reciben políticos, jueces o periodistas que no se consideran cohecho.
Según titula
El País en portada,
“el PP minimiza el caso Camps para ocultar sus supuestas mentiras al juez”. Y en su titular de páginas interiores dice:
“El PP se esfuerza por desviar el tiro de la posible mentira de Camps”.
El Mundo refleja que varios centenares de defensores y detractores de Camps se enfrentaron ayer en la puerta del auditorio de Alaquàs, donde el PP había convocado un acto de conmemoración de su victoria en las pasadas elecciones europeas. En dicho acto el secretario general del PP valenciano,
Ricardo Costa, pidió un aplauso para Camps, “
el más honesto, el más honrado, el que más ha hecho por la Comunitat” e instó a los alcaldes y representantes del PP a ir
“con la cabeza bien alta” y a no dejarse
“atacar” a pesar de
“los insultos, amenazas y pancartas”.
La Vanguardia destaca en portada:
“Camps descarta la dimisión, Rajoy aguarda”.
Público señala que
“el PP antepone la palabra de Camps a las pruebas judiciales”. Paralelamente indica que
“la estrategia de Camps irrita al PP”.
Apoyo del PP, defensa de Camps
Por su parte, el PP hizo una declaración pública, leída por el vicesecretario de comunicación,
Esteban González Pons, en la que insiste en defender a Camps. En ella anunciaba que
“mantiene plenamente su confianza en Camps, que cuenta con el apoyo de todo el partido, y confía en que la actuación de la justicia terminará con un pronunciamiento favorable. Hay un procedimiento judicial abierto y ni el partido ni sus dirigentes van a entrar a comentar o a debatir su contenido por respeto a la acción de la justicia”. “La defensa de Francisco Camps recurrirá el auto y pedirá el archivo de la causa puesto que las acusaciones vertidas no han sido probadas. El PP respalda la interposición de dicho recurso”, señala el comunicado.
Y por último, el protagonista de toda esta historia, Camps, declaraba que
“la verdad está más cerca que nunca”. En un acto del partido en Algemesí, donde fue recibido con aplausos por un grupo de vecinos, Camps aseguró:
“Quedan uno o dos escaloncitos y entonces esta cuestión tan extraña, absurda y tan estrafalaria habrá pasado al pasado”.
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