Torrijada en el Mercado de Maravillas para promover el consumo de pan

El conocido cocinero de Humanes, Mario Sandoval, y su madre Teresa Huertas, se han puesto al frente de unos fogones improvisados a la entrada de este mercado, situado en la calle de Bravo Murillo, y compartieron con el público, en su mayoría jubilados, sus secretos para cocinar unas buenas torrijas.

Los máximos responsables de la asociación de Panaderos de Madrid (ASEMPAN), Ramón Gil y José María Fernández Vallado, han mostrado su preocupación por el descenso del consumo de este producto en España, asegurando que en los últimos 30 años ha bajado un 35 por ciento y si en 1976 se consumía de 82 kilos por persona y año, actualmente es de 53,8 kilos. Esta cifra, está por debajo de la media europea, que se sitúa en torno a los 66-70 kilos por persona y año.

Según la Comunidad, que estuvo representada en la torrijada por la viceconsejera e Economía, Concha Guerra, la región cuenta con 435 productores de pan y 2.400 comercios especializados en venta de pan, bollería y pastelería, a los que hay que sumar los cerca de 20.000 establecimientos de alimentación general que también se dedican a su venta.El sector pandero cuenta con más de 25.000 puestos de trabajo directos, factura unos 5 millones de euros al año e invierte alrededor de 2 millones de euros en innovación, especialmente en técnicas del frío aplicadas a la fermentación.

Torrijas madrileñas
Durante la Semana Santa se estima que solo en la Comunidad se consuman casi 4 millones de torrijas artesanales a un precio medio de entre 1,80 a 2,30 euros la unidad. El consumo de las elaboradas en los hogares de cada madrileños se calcula en unos 8 millones de unidades, según fuentes de la Comunidad. Entre críticas y alabanzas, los asistentes dieron buena cuenta de todas las torrijas, tanto de las cocinadas allí mismo por Sandoval y su madre como de las ofrecidas por el gremio de los panderos.

En lo fundamental de la receta todos parecían estar de acuerdo: pan de dos días; cortarlo en rebanadas; empaparlo en leche con azúcar, canela y piel de limón; pasarlo por huevo batido, y a la sartén con el aceite muy caliente. Porque según la madre de Sandoval, que con ironía se autodefinió como "la madre del cordero", la base fundamental para hacer bien las torrijas es la temperatura del aceite, "que tiene que estar fuerte.El acto de este lunes forma parte del proyecto "Madrid Escenario Internacional de la gastronomía", que al comunidad ha puesto en marcha para difundir la gastronomía y restauración madrileña.