La rueda de prensa arbitral previa a la final de Copa ha caído como una bomba a poco más de 24 horas de que comience la final, algunos de los más sorprendidos han sido los propios dirigentes del Real Madrid y Barcelona. Desde la casa blanca se piensa que lo dicho por González Fuertes le inhabilita para estar mañana al frente de la sala VOR. Así que el Real Madrid se plantea pedir a la Federación que retire a tanto a González Fuertes como a De Burgos Bengoetxea de la final de la Copa del Rey.
Al ser preguntado De Burgos por los vídeos de Real Madrid TV, González Fuertes pidió la palabra y dijo "yo sí voy a hablar de esos vídeos... Más que lo que se dice, son las consecuencias de lo que se dice. Estamos viendo en redes sociales a gente anónima que insulta y amenaza sin ningún control. Responsables de redes oficiales de clubes continuamente atacando a nuestro colectivo, además de actuaciones de jugadores y comunicados dando pie a pensar que no somos honestos en nuestras decisiones. Las consecuencias son que cuando hablas de robo y palabras malsonantes, esa frustración que generas en el aficionado la pagan con el niño y la niña que cogen un silbato y tienen que pitar un partido infantil. Es la consecuencia de poner la diana en la cabeza de un compañero. Es bueno y sano para todos volver a un fútbol más saludable".
El Real Madrid se encuentra a la espera de que sea la propia Federación la que decida el cambio del colegiado asturiano, ya que cree que después de lo afrimado no puede tomar decisiones de una manera imparcial.
Por el momento, ni la Federación, ni el Comité Técnico de Árbitros tienen en mente realizar ningún movimiento, pero sí que es cierto que sus palabras han sido sorpresivas, muy por encima de las lágrimas de un emocionado De Burgos Bengoetxea, que se han tomado como una defensa del colectivo.
Piensan que todo obedece a una pregunta respecto a los vídeos de Real Madrid TV y que han dicho lo que consideran, después de mucho tiempo aguantando críticas muy fuertes. Tal y como han comentado a algunos medios no estaba preparado y ha sido una exposición de lo que realmente sienten con lo que la confianza del CTA en los árbitros designados para la final del sábado continúa intacta.